Siete días de julio

Distintos observadores han venido especulando con la posibilidad de que el cambio de poder producido en el grupo -y pese a la fuerte reserva sobre la estructura de participaciones tejida en torno al conglomerado bajo control de Alicia y Esther Koplowitz-, lleve a un desdoblamiento, entre la parte industrial y la parte financiera, integrada por la propia Conycon, de las participaciones de la compañía en Banesto y Central, Banco Zaragozano, la aseguradora Uniseguros y la inversora Corporación Financiera Reunida, SA (Cofir), controlada por el magnate italiano Carlo de Benedetti.Los hechos son los siguientes: Alberto Cortina y Alberto Alcocer dimitieron, el pasado 8 de julio, de sus cargos de consejeros delegados de Inmobiliaria Conycon, SA, constituida con un capital de 3.000 millones de pesetas. Cortina continuana en su puesto, ahora por designación de Construcciones y Contratas, mientras reaparecen en escena los hombres que los Albertos habían eclipsado.

El mismo día 8 los Albertos dejaban a título personal los cargos de presidente y consejero delegado de la pequeña Promotora Construcciones y Contratas. Sus sucesores, Construccíones y Contratas -en la persona de Alberto Alcocer- y Justiniano de Miguel. La apretada agenda de dimisiones de aquel día llevaba también a Alcocer y Cortina a dejar los mismos puestos en Inmobiliaria Construcciones y Contratas, SA, ante el secretario de la sociedad, Manuel Cervantes. Ambos directivos eran sustituidos por la misma fórmula.

El 11 de julio la operación se producía en General de Obras y Servicios, SA. La presidencia pasaba a Construcciones y Contratas, en la persona de Alberto Cortina, mientras Justiniano de Miguel se hacía cargo del puesto dejado en el consejo por Alcocer.

Alcocer y Cortina dejaron también en julio la presidencia y dos puestos en el consejo de Vertederos de Residuos, SA, la sociedad que hizo famosas las gabardinas de ambos hombres de negocios. Construcciones y Contratas (presidente) nombró en este caso a Alberto Martínez Elbal como presidente, mientras que el socio de Justiniano de Miguel en Emitra, José Luis García Lozoya, accedía al puesto del consejo vacante, y continuaba Isidoro Aguado en la vicepresidencia.

El día 12 continuaría la cadena de dimisiones en los puestos que ocupaban Cortina y Alcocer a título individual. Ambos hombres de negocios eran sustituidos por Construcciones y Contratas en la persona de Alberto Martínez Elbal. García Lozoya y Aguado pasarían a ocupar los puestos de consejeros delegados. El mismo día los Albertos dejaban también sus puestos directivos en Estaciones de Servicios a Martíntz Elbal y a De Miguel. Este conjunto de dimisiones sería ratificado estatutariamente, en todos los casos, en octubre y noviembre.

Aves Frías. SA, es el extraño nombre de la única sociedad en la que las esposas de Alberto Cortina y Alberto Alcocer,Alicia y Esther Koplowitz, han sucedido a sus maridos como presidentas, también desde julio del año pasado. Alicia y Esther ostentarán la presidencia de Aves Frías alternativamente, durante plazos sucesivos de un año. La sociedad, constituida en 1974 tiene un capital de 19 millones de pesetas.

Por el contrario, Portland Valderr¡vas, SA, una de las grandes del conglomerado industrial no ha registrado cambios apreciables. Alcocer y Cortina no han sido relevados del consejo de la compañía. Lo mismo ocurre en la constructora FOCSA.

Otras de las pequeñas sociedades en las que no han trascendido cambios son Suministros, Importaciones y Manten¡mientos Electrónicos y Financiera de Servicios Rústicos.