D'Alessio, un fiscal para un enigma

El procurador general de Argentina, Andrés d'Alessio, asegura categóricamente que si existieran indicios de fusilamientos en el asalto terrorista al regimiento de La Tablada sin duda se abrirían sumarios judiciales contra los militares que estuviesen implicados. D'Alessio, de 48 años y padre de nueve hijos, fue uno de los jueces que condenaron a los comandantes de las juntas militares argentinas de la dictadura. Desde su cargo, equivalente al fiscal del Estado, y ante el silencio de los jueces, D'Alessio lleva la voz cantante en la investigación sobre el asalto a La Tablada.A las acusaciones de que en La Tablada hubo fusilamientos replica D'Alessio: "No conozco nada asertivo en ese sentido. Lo que sí le puedo decir con toda certeza es que en la medida en que haya cualquier indicio que pueda llamarse tal, sobre este tipo de delito, o cualquier otro vinculado con estos hechos, va a haber una investigación tan exhaustiva como la del asalto a La Tablada, con el mismo entusiasmo por parte del ministerio público. Pero le señalo una cosa. Si usted toma estas versiones que han llegado, por vía periodística sobre todo, y empieza a compararlas, empieza a encontrar discordancias entre ellas.

D'Alessio empieza a encontrar en la Prensa una explotación, por ejemplo, de errores que era natural que se produjeran". Y concluye: "Lo único que puedo decirle es que en la medida en que haya un indicio que pueda llamarse tal, va a haber una investigación judicial".

A la insistencia de si procesarían a militares, replica categórico el procurador: "No le quepa ninguna duda. De cualquiera que haya realizado al gún delito vinculado con esto". Señala D'Alessio que "hay un sumario abierto respecto de los malos tratos que puedan haber tenido cinco detenidos, cinco sobre los veinte que están detenidos, en un traslado ocurrido el sábado siguiente a los hechos, y sobre eso me consta porque estuve yo con el juez en el momento en que ordenaba abrirlo, que mandó que los re visaran los médicos forenses y que se investigara" si hubo detenidos el primer día del asalto dentro del regimiento. D'Alessio insiste en que no Ante unas fotos que muestran a militares que conducen a dos detenidos el lunes 23 de enero, replica el procurador que "éste es uno de los elementos que sin duda se están analizando en este momento. Estas fotografías, junto con el material fílmico, porque una fotografía no da más que una condensación estática de un hecho, se están analizando tanto por el ministerio público como por el juzgado, para saber si efectiva mente se trata de... Por ejem plo, fíjese que, por lo que yo veo, aquí se ve gente tirada en el suelo, pero en ese momento, y si esto es, como yo supongo la guardia de prevención, hubo rehenes que salieron en es momento. Por consiguiente es posible que esto sean rehenes o que esto sean subversivos. Esto se está investigando".

La'conexión nicaragüense'

Sobre la existencia de una conexión nicaragüense en La Tablada, D'Alessio declara: "Existen algunos indicios, pero yo no podría afirmar categóricamente que sea Nicaragua. Obviamente, algunos detenidos es público y notorio que viajaban a Nicaragua. Por ejemplo, tengo entendido que en un Entre Todos hay una entrevista, por alguno de los detenidos y alguna de las personas a las que se ha requerido captura, a Tomás Borge, que supongo que tendría lugar en Nicaragua. Entiendo que algunos de ellos viajaron a Nicaragua. De ahí a hablar de una conexión nicaragüense, en mi posición de representante del ministerio público, no estoy en condiciones de poderlo afirmar".

Sobre la acusación de que los militares no intimaron a rendirse a los terroristas, aclara D'Alessio que "el Código Penal exige la intimación a rendirse en caso de rebelión, salvo que se hubiera hecho ya uso de armas. En este caso, se trata de un grupo que entró disparando al cuartel, matando por ejemplo al soldado Tadía, que, según las referencias, estaba desarmado y le dispararon una ráfaga. En cuanto a las tentativas de rendición, no me constan. Puede ser que del análisis de las declaraciones, que yo no he leído todavía, surgiera esto. Yo estaba en San Martín de los Andes, a 1.600 kilómetros de aquí, siguiendo los acontecimientos por la radio en un taller mecánico. En ese momento recuerdo haber escuchado a un periodista que decía que habían hecho una tentativa de rendirse, y cuando avanzaron recibieron una descarga cerrada las fuerzas de represión. Así que habrá que reconstruirlo también dentro de todo el fárrago de cuestiones que fue eso". "La única denuncia proveniente de los detenidos que fehacientemente conocí", añade, "fue la que recibí el otro día, cuando terminaba la conferencia de prensa, firmada por tres o cuatro de los defensores, respecto de un incidente dentro de la penitenciaría, que se los habían llevado, a uno que estaba herido, obligándolo a apurarse, a la enfermería y otro en un traslado al servicio odontológico. Ésta es la única cosa que tengo fehaciente".