El motín de 167 jóvenes de Carabanchel concluyó con la promesa de que no habrá represalias
Los 167 presos del Centro de Jóvenes de la cárcel de Carabanchel, en Madrid, que se amotinaron la tarde del lunes, abandonaron los tejados de la prisión hacia las cuatro de la madrugada de ayer, tras 10 horas de revuelta. El desalojo se produjo después de que los responsables del centro se comprometieran a no tomar represalias. Los internos bajaron al patio de la prisión de uno en uno, ayudados por una escalera mecánica de los bomberos. En la calle, varias decenas de miembros de la Coordinadora de Barrios y otros colectivos mantenían ayer una asamblea permanente hasta que se produzca una mejora "real" de las condiciones de vida de la cárcel.El motín comenzó a las 17.45 del lunes, en protesta por el traslado de nueve internos a la prisión de Zamora, como presuntos responsables de la revuelta que se produjo el 14 de enero pasado, y por las malas condiciones de vida en el interior. Varios guardias civiles que custodian el centro dispararon al aire para impedir la fuga de 17 de los participantes en el motín. Francisco Alonso, director del Centro de Jóvenes, que el lunes tomó posesión, se comprometió a "no tocar ni un pelo" a los reclusos y a hacer lo posible para traer de regreso a los trasladados a Zamora.
Hacia las dos de la mañana, cuando la mayoría de los reclusos tenía intención de bajar, un grupo disconforme apedreó a los funcíonarios que acercaban la escalera para acceder al tejado. La situación se mantuvo estable hasta las tres, cuando llegó la escalera. Las presos, jaleados desde el exterior por familiares y amigos, accedieron a bajar.
Cuando casi la mitad de los amotinados había descendido, se produjo otro incidente. "Están pegando a los que bajan", gritó un recluso, y hubo pedradas y gritos dentro y fuera de la cárcel. El mismo interno reconoció que todo había sido una falsa alarma. Los presos continuaron bajando lentamente, de uno en uno, hasta las 4.30. A esa hora, los bomberos ayudadaron a bajar a varios reclusos que se habían herido durante el motín, extremo que niega el Ministerio de Justicia.
La Junta de Régimen de la prisiónestudiaba ayer posibles sanciones y, según informa Efe, los presos que participaron en el motín se encontraban aislados. La orden de excarcelación de uno de los amotinados fue recibida cuando éste estaba en el tejado, participando en el motín, según fuentes de los sindicatos de funcionarios. Fue puesto en libertad al concluir los incidentes.
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