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EL ÍDOLO CAÍDO

Winnie Mandela disuelve su 'club de fútbol' tras las acusaciones de asesinato

Winnie Mandela, la esposa del encarcelado líder negro surafricano Nelson Mandela, ha decidido deshacerse de su polémico equipo de guardaespaldas, conocido como club de fútbol Mandela, y echarlos de su casa de Soweto, que ayer fue registrada por la policía en busca de pruebas de un secuestro y asesinato en el que aparecen involucrados sus guardianes. Fuentes de la policía informaron que se encontraron rastros de sangre en la casa, supuesto escenario del secuestro y asesinato a golpes de Stompie Moeketsi Seipei, un chico negro de 14 años cuyo cuerpo descompuesto fue identificado la semana pasada.

Aunque ayer todavía había miembros del club de fútbol en la casa de Mandela cuando llegó la policía, el pastor y dirigente antiapartheid Frank Chikane afirmó la víspera que Winnie había decidido disolver el grupo tras tomar en cuenta los consejos en tal sentido expresados por su esposo, Nelson, durante una entrevista que ambos sostuvieron el miércoles pasado en la prisión donde éste cumple cadena perpetua.Por su parte, el ilegal Congreso Nacional Africano (ANC) emitió ayer un comunicado en el que, además de reconocer que Winnie "ha cometido errores", solicita la reincorporación de la dirigente a Ias estructuras y disciplina" del movimiento antiapartheid, del que había sido marginada la semana pasada por varias organizaciones.

La decisión de Winnie y la respuesta del ANC parecen formar parte de una estrategia conjunta para reducir los daños a la imagen del movimiento antiapartheid causados por la conducta del impopular club en los últimos meses. El anuncio hecho por Chikane se produjo después de que éste hablara por teléfono con el presidente del ANC, Oliver Tambo -en el exilio en Lusaka, Zambia-, tras lo cual se reunió por espacio de cinco horas con Winnie. Chikane dijo que él personalmente se encargaría del alojamiento de los 30 integrantes del grupo en otras casas de Soweto.

Acusación de asesinato

Miembros del grupo, formado en 1986 en Soweto por varios preparadores físicos de equipos de fútbol locales, han sido acusados por la policía de haber secuestrado a cuatro jóvenes negros de una iglesia metodista el 29 de diciembre y de haberlos llevado a la casa de Winnie para interrogarlos. El cuerpo destrozado a golpes de uno de ellos, conocido como Stompie, fue reconocido el pasado miércoles. La supuesta causa del asesinato es que Stompie se negó en los interrogatorios a admitir que el pastor blanco de la iglesia había abusado sexualmente de él y de los otros.

La muerte de Stompie, complicada por el asesinato a tiros de un médico negro que había atendido a los jóvenes secuestrados junto a Stompie y por la muerte de uno de los guardaespaldas, sacó a la luz pública una serie de actos: de abuso de poder y arbitrariedades cometidas por el club y minó el prestigio de Winnie. El jueves pasado, la mayor organización antiapartheid de Suráfrica, el Frente Democrático Unido (UDF), y el más importante sindicato negro, el Congreso de Sindicatos Surafricanos, habían condenado y aislado formalmente a Winnie y a su club.

El comunicado emitido el sábado por el ANC tras una reunión de dos días en Lusaka es el primero de la organización fundada por Nelson Mandela sobre este tema. La nota condenó las "indignas actividades" de Winnie y afirmó tener "razones para creer que el club fue objeto de una infiltración por el enemigo y que muchas de sus actividades fueron guiadas desde el enemigo". Tras tomar en cuenta "la inmensa contribución" hecha en el pasado por Winnie a las lucha de los negros, el ANC pide a los dirigentes del movimiento antiapartheid en Suráfrica que le ayuden a "reencontrar su lugar en la disciplina del movimiento de masas".

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