Un senador del PSOE derriba su chalé al no hacerlo Obras Públicas

El senador socialista por Castellón, Benjamín Salvador, decidió derribar en la tarde del viernes por propia iniciativa su chalé ubicado en la primera línea de la playa de XiIxes (Castellón) para poner fin a las acusaciones sobre tráfico de influencias de que era objeto por parte de otros vecinos de la población.El chalé de Benjamín Salvador, que a su vez es secretario general de la agrupación local del PSPV-PSOE, de Vall d'Uixó, fue el único que momentáneamente se salvó de la operación de derribo que el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) llevó a cabo el pasado día 1 contra 18 viviendas construidas, cuyos dueños recurrirán por vía judicial, en la primera línea de la playa de XiIxes dentro de la zona marítimo-terrestre que la actual ley de Costas considera como de dominio público.

La vivienda del senador socialista también iba a ser derribada en breve, aunque esa edificación estaba inscrita en el registro de la propiedad de Nules y para demolerla era preciso anular esa inscripción. Benjamín Salvador manifestó ayer que ha querido acelerar ese proceso "para poner fin a las habladurías" y acusaciones de tráfico de influencias por parte de los propietarios a los que el MOPU derribó sus viviendas el pasado día 1.

"Sabíamos que se nos iba a requerir para que derribáramos el chalé, y antes de ello hemos preferido derribarlo nosotros para poner fin a las suspicacias. Qué más da que lo derribe el MOPU o nosotros", dijo Benjamín Salvador, quien añadió que lamentaba la incomprensión de los vecinos que han llegado a acusarnos de tráfico de influencias, cuando en realidad lo único que nos separaba era un simple trámite burocrático".

El MOPU ha decidido derribar los chalés de la playa de Xilxes básicamente por dos razones: la primera, de carácter técnico, porque considera que esas viviendas estaban acelerando el proceso de erosión marina que amenazaba con deteriorar gravemente esa playa, y la segunda, de carácter legal, ya que según el MOPU esas viviendas, construidas en el año 1958, ocupan la zona de dominio público y carecen de concesión administrativa.