Las emparedadas de El Lobo Feroz murieron hace cuatro o cinco años
Los dos esqueletos emparedados en el sótano del club de alterne El Lobo Feroz, en la calle de Lucientes, corresponden a dos mujeres que murieron hace cuatro o cinco años, según las primeras impresiones del antropólogo José Manuel Reverte. Las víctimas tenían entre 30 y 40 años.
El esqueleto encontrado bajo la escalera del local corresponde a una hembra de 1,50 metros de altura, 30 años de edad, y llevaba un anillo y un collar de bisutería con pedrería. Los huesos que estaban ocultos en otro lugar del sótano pertenecen a una mujer de 1,70 de estatura, su edad oscila entre 35 y 40 años, y conservaba un colgante con la cruz de Caravaca y un cordón de cuero anudado alrededor de un tobillo.
El doctor Reverte, además de someter los huesos a diversas pruebas químicas, tratará de recomponer los esqueletos con objeto de comprobar si presentan fracturas o lesiones indicativas de algún tipo de agresión.
Los inspectores del Grupo de Homicidios van a estudiar si en las listas de desaparecidos hay ,dos mujeres de características coincidentes con las de las emparedadas. "Pero es una tarea muy complicada", dijo un portavoz, "porque hay ciudadanos que presentan denuncia y luego no la retiran cuando aparece su familiar, por lo que estas personas siguen oficialmente desaparecidas".
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