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La CE cree que se camina hacia una Europa más libre

El ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordáñez, advirtió ayer en Viena que la Comunidad Europea (CE) no admitirá lecturas selectivas del documento de la Conferencia de Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE). Fernández Ordóñez, que intervino en representación de los doce en la segunda jornada de la sesión de clausura de la CSCE, dijo que la CE considera que el documento colma sus aspiraciones en la conferencia. "Es un hito histórico en el camino hacia una Europa más libre, más segura y más próspera", afirmó.

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"Los nuevos compromisos son impresionantes. Lo crucial es, sin embargo, su cumplimiento", agregó Fernández Ordóñez.Rumania ratificó ayer su aislamiento en la comunidad de naciones europeas con una intervención de su ministro de Asuntos Exteriores, loan Totu, que anunció que Bucarest sólo aplicará los compromisos firmados en Viena si no contradicen las leyes, condiciones y tradiciones rumanas. Incluso aliados de Rumanía, como Polonia, han advertido ayer que son las leyes nacionales las que deben adecuarse a los compromisos internacionales. Totu acusó a Estados Unidos y otros países que han criticado la violación de los derechos humanos en Rumanía de querer debilitar el socialismo e injerirse en los asuntos internos de los países del Este. Totu aseguró que las garantías de libertad religiosa y de movimiento acordadas en Viena no serán aplicadas en Rumanía y dijo que le gustaría que en los demás países firmantes hubiera tantas libertades democráticas, tanto progreso y bienestar como tienen los rumanos. "No pedimos permiso a nadie para nuestro desarrollo político, que responde a los deseos de todo el pueblo rumano", dijo el representante del país más criticado en la CSCE por la miseria y represión generalizadas que sufre su población bajo el régimen estalinista de Nicolae Ceaucescu.

Reunión con Shevardnadze

El ministro español tuvo en Viena una jornada de intensos contactos diplomáticos. Con el ministro soviético de Asuntos Exteriores, Edvard Shevardnadze, celebró la primera reunión entre un presidente del Consejo de Ministros de la CE y un jefe de la diplomacia soviética para tratar sobre las relaciones entre Moscú y Bruselas y sobre soluciones para conflictos regionales, especialmente Oriente Medio y Centroamérica. Tras la reunión, Fernández Ordóñez anunció que viajará oficialmente en marzo a la URSS y expresó su convicción de que la prevista visita del líder soviético, Mijail Gorbachov, a España no se producirá en el primer semestre de este año, por coincidir éste con la presidencia española de la CE.Shevardnadze, que intervendrá hoy ante el pleno, calificó el documento de Viena como "gran acontecimiento histórico" en el proceso global europeo. El ministro soviético hizo saber su preocupación por la situación que atravesará Afganistán después de la retirada de las tropas de su país. La gestión de la presidencia española de la CE en el conflicto de Oriente Medio fue también la cuestión principal en las entrevistas de Fernandez Ordóñez con los ministros de Exteriores de Grecia y Suecia. Shevardnadze mostró su interés por esas acciones comunitarias.

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El ministro español informó a Shevardnadze y a sus otros colegas sobre su reciente viaje a Israel, las visitas previstas del líder de la OLP, Yasir Arafat, y del primer ministro israelí, Isaac Shamir, a Madrid, así como de su gira con los ministros de Exteriores de Grecia y Francia a Jordania, Egipto y posiblemente Siria. "La CE no media en el conflicto de Oriente Próximo, sino que quiere impulsar un proceso de paz en una región de vital importancia para nosotros. La Comunidad quiere evitar el aislamiento de Israel. Pese a las claras diferencias, ellos también nos han demostrado que quieren mantener los contactos", manifestó el ministro español a EL PAÍS.

En relación con los resultados de Viena, Fernández Ordóñez dijo que se habían cumplido las aspiraciones españolas. La firme condena al terrorismo y compromiso le cooperación para su erradicación, la conferencia sobre protección de ecosistemas a celebrar el próximo año en Palma de Mallorca y el foro sobre libertad de información, que comenzará en abril en Londres, en cuya preparación juega una parte muy activa España, son algunos de los aspectos más destacados en este contexto.

En su discurso ante el pleno, Fernández Ordoñez subrayó la importancia de los nuevos mecanismos de control y seguimiento del respeto a los derechos humanos. Los doce exigirán el cumplimiento de los compromisos suscritos manifesto, en referencia a la violación de los derechos humanos en Rumanía y las oleadas de detenciones en Checoslovaquia y la RDA estos días.

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