Los observadores españoles que verificarán el acuerdo sobre Angola, preocupados por su seguridad

El teniente coronel José Rodríguez Rodríguez, el comandante José Segura Fernández y el capitán Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu son los tres primeros militares españoles que formarán parte de¡ grupo de observadores que, bajo la supervisión de la ONU, verificarán el cumplimiento de los acuerdos sobre Angola, y especialmente la retirada de los 50.000 soldados cubanos desplegados en ese país. Rodríguez Rodríguez, nacido en abril de 1941, manifestó ayer. "Nos preocupa el tema de la seguridad. Y no sólo por los grupos armados existentes, sino también por enfermedades y otras razones".

CARLOS YÁRNOZ, Los tres militares partirán hacia Luanda, capital de Angola, el próximo 3 de enero y permanecerán en Angola nueve o diez meses, hasta que sean sustituidos por otra comisión. En total, serán 31 los meses en que habrá militares españoles destacados en Angola. Los tres mencionados pasarán primero varios meses en Luanda, como miembros de una delegación integrada por 21 militares al mando de un general brasileño."Los primeros meses serán tranquilos. Luego, Dios dirá", señaló el teniente coronel. "Nuestra misión consistirá en verificar que los acuerdos entre Cuba, Angola y Suráfrica se cumplen", agregó Rodríguez Rodríguez, quien insistió en que él y sus compañeros se encuentran "ilusionados" por la labor que realizarán. "Estamos esperanzados en que vamos a dejar la bandera de España donde se merece", dijo.

Preguntado si los observadores militares llevarán armas, el teniente coronel respondió: "¿Armas? Es una misión de paz. La única arma que llevaremos será una navaja multiuso. Ni siquiera machetes. Lo tengo terminantemente prohibido en mi grupo".

Rápida selección

Rodríguez Rodríguez señaló que tanto su selección como la de sus compañeros ha sido muy rápida, porque el acuerdo para enviar observadores españoles se produjo hace sólo dos semanas. Él acababa de regresar del Reino Unido, donde ha realizado un curso de especialización, cuando recibió una llamada telefónica en su domicilio y le comunicaron que el jefe del Estado Mayor del Ejército, teniente general Miguel Íñiguez, lo había elegido para encabezar la delegación española.

A partir de ahí, el teniente coronel seleccionó "con total libertad" al :resto de compañeros, eligiendo a personas que hablan inglés, así como a militares con amplia experiencia en actividades en el campo. Los tres han dispuesto de pocos días para estudiar las condiciones de Angola y el plan de paz.

Rodríguez Rodríguez tiene cuatro hijos, habla inglés y tiene un nivel medio de portugués. Diplomado en Estado Mayor en el Reino Unido, es economista y cuenta con el título de Gestión Internacional de Defensa conseguido en Monterey (EE UU).

El comandante Segura Fernández, nacido el 9 enero de 1944, tiene tres hijos, habla inglés y ha realizado un curso avanzado de Infantería en EE UU. También ha realizado trabajos técnicos en la República Federal de Alemania y es experto en automovilismo.

El capitán Gutiérrez Díaz de Otazu nació en marzo de 1957. Casado y con dos hijos, tiene el título de Paracaidismo y es experto en operaciones de supervivencia.

El próximo mes de marzo, se unirán a estos militares otros cuatro oficiales españoles. Entonces serán ya 70 los militares extranjeros que actuarán como observadores. Además de España, participan en la operación Noruega, Checoslovaquia, Yugoslavia, Brasil, Argentina, Argelia, Congo, India y Jordania.

Rodríguez Rodríguez, Segura Fernández y Gutiérrez Díaz de Otazu, acompañados por el jefe del Ejército, fueron recibidos en la tarde de ayer por el ministro de Defensa, Narcís Serra, quien se despidió de ellos y les deseó suerte en su trabajo.

El envío de estos observadores es la primera parte de la aportación española al proceso de pacificación en el África Austral, ya que en los próximos meses también serán enviados a Namibia una decena de aviones Aviocar y unos 200 hombres -pilotos, técnicos y mecánicos- como cascos azules para garantizar el cumplimiento de las condiciones de pacificación.