Comunistas y magistrados italianos critican la ley sobre la droga
El partido comunista italiano se opondrá con todas sus fuerzas a la aprobación por el Parlamento del nuevo proyecto de ley contra la droga que acaba de aprobar el Consejo de Ministros y que considera "ilegal" el uso de cualquier tipo de estupefacientes en este país. Por otra parte, los magistrados se han declarado de acuerdo con el espíritu de la nueva ley pero no con las sanciones previstas en ella contra los toxicómanos.El secretario comunista Achille Occhetto, en un discurso pronunciado en Bolonia, interrumpido 58 veces por los aplausos, dijo que la nueva ley, una de las más duras del mundo, está profundamente "equivocada", ya que se trata de un proyecto, dijo, "hecho deprisa y corriendo". Según el líder comunista, la. nueva ley es además "injusta" porque está encaminada a castigar, sobre todo, a los toxicómanos, los más fáciles de descubrir.
Occhetto ha afirmado que su partido apoyará todo tipo de iniciativas y de manifestaciones contra la droga y contra los mercaderes de la muerte, pero que se opondrá con dureza a que la ley pase en el Parlamento sin un cambio radical del proyecto presentado por el Gobierno.
Los magistrados han declarado que aunque les gusta el espíritu de severidad de la nueva ley contra la droga, temen que ella haga recaer excesivas responsabilidades sobre las espaldas de los jueces.
Raffaele Bertoni, presidente de la Asociación Nacional de Magistrados, ha subrayado que la nueva ley, si resulta aprobada por el Parlamento, plantearía una serie de problemas de no poca monta: "Ante todo, tengo buenas dudas, dice, de que las sanciones previstas sirvan para disuadir del consumo de droga. Por otra parte, el juez acaba siendo árbitro de dichas sanciones, cosa nada positiva ni para la gente ni para la imagen de la Magistratura".
El problema de la droga, añade el alto magistrado, es sobre todo una cuestión de prevención, "pero ésta ya existíaen la vieja ley sin que nunca se haya hecho nada". Por lo que se refiere a la pena que condena a cadena perpetua a los grandes traficantes, Bertoni afirma que está de acuerdo, pero que el problema seguira siendo que "para castigar a un traficante de esos, primero hay que pescarlo".
