Un miembro de los GAL declara ante el juez que Amedo le ordenó reclutar a militares franceses

, El subcomisario de policía José Amedo Fouce ordenó reclutar a militares franceses para que actuaran en nombre de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) contra los refugiados de ETA en el territorio del país vecino. Así lo ha testificado Patrick Pironneau, uno de los supuestos miembros de los GAL, actualmente detenido en Burdeos, ante el juez de Bayona. Las manifestaciones de Pironneau están siendo investigadas por el magistrado Armand Riberolles, que dirige la instrucción de un sumario en el que se encuentran implicados, por el momento, cuatro ciudadanos franceses, supuestos responsables y cooperadores de los GAL en Francia.

En una fecha no determinada a finales de 1985, Patrick Pironneau recibió el encargo del subcomisario Amedo de contratar miembros de los GAL, especialmente entre "militares de confianza". Pironneau recibió por estos servicios, en pago adelantado, la cantidad de 5.000 dólares -unas 600.000 pesetas-, que fueron transferidos a su cuenta corriente. El origen de esta suma está siendo investigado también por la justicia francesa.El ciudadano francés había establecido relación con el subcomisario José Amedo y con el inspector Michel Domínguez -procesados ambos por su presunta relación con los GAL- a través de su amigo Christian Hitier. Los policías usaron los nombres supuestos de Antoine y Thomas. Según se desprende de las declaraciones judiciales de Pironneau, a las que EL PAÍS ha tenido acceso, fue el propio Amedo quien le propuso una noche integrarse y colaborar con los GAL después de que el policía hubiera bebido numerosas copas. Pironneau se negó en principio a colaborar en el proyecto, al comprender que se trataba de la "eliminación fisica" de determinadas personas. Pero Pironneau acabó aceptando la propuesta, al parecer, a la vista del dinero que se le ofrecía ya que se encontraba en graves dificultades económicas.

Ex agente de la OAS

Pironneau era la persona idónea para desarrollar esos contactos con los militares, ya que con anterioridad había militado en la Organización del Ejército Secreto (OAS) -creada en Argelia en 1961 y declarada ilegal aquel mismo año- y durante un tiempo estuvo también vinculado al Servicio de Acción Cívica (SAC), organización gaullista de espionaje fundada en 1958 y disuelta en julio de 1982.Aunque Pironneau aceptó el dinero y se comprometió a cumplir la misión encomendada, nunca llegó a realizarla, según afirma el propio detenido en la instrucción sumarial. Buscaba siempre cualquier excusa por su retraso, lo que provocó la indignación y las amenazas de Amedo, que le presionaba para que cumpliera su parte del pacto.

Patrick Pironneau, de 47 años, nació en Cahors, pero se trasladó a vivir a Pau, donde se especializó en el mundo del seguro; allí actuó como agente y trabajó en colaboración con su hermano, con el que instaló una oficina. En Pau conoció a Christian Hitier, que, como él, había estado vinculado a la OAS. Los dos eran grandes amantes del jazz, les gustaba la buena cocina y coincidían en su ideas políticas de extrema derecha.

Pironneau fue uno de los primeros ciudadanos franceses detenidos tras el descubrimiento de diversos documentos de los GAL en el interior de un zulo en el sur de Francia. Pironneau fue arrestado en Tours y trasladado a la prisión de Burdeos, lejos de su amigo Hitier, que se encuentra en la de Tarbes. El pasado 24 de noviembre Pironneau e Hitier volvieron a coincidir en el Palacio de Justicia de Bayona, cuando el juez Armand Riberolles les enfrentó en un careo.

Ésta fue la segunda vez que Pironneau declaraba ante Riberolles. La anterior el pasado 26 de octubre. Nunca ha negado sus relaciones personales con Hitier ni sus vinculaciones con Amedo y Domínguez.