Voto de confianza
Papel y dinero han vuelto a terminar en tablas su cotidiano enfrentamiento ante la ausencia de expectativas concretas, aunque esta vez los operadores han podido disfrutar de una sesión movida. La contratación en los corros ha superado a la de jornadas anteriores con lo que, a este nivel, hay que suponer que compradores y vendedores han decidido aceptar niveles de riesgo bastante mayores de lo habitual. Los últimos sondeos sobre la intención de vote en Estados Unidos parecen tener mucho que ver con esta actitud de los inversores españoles, al tiempo que confirman la ausencia de expectativas claras para unos mercados que saben que están muy cerca del nivel máximo del año.La ponderación de los factores políticos ha hecho olvidar, por el momento, las tomas de posiciones de los grandes grupos en algunos sectores o sociedades, lo que viene a demostrar que esa situación también ha sido utilizada como excusa por la inversión a corto para sus movimientos, aunque la facilidad con que algunos valores se mantienen al alza ha dejado algunas dudas en el aire.
La mayoría de los sectores han registrado movimientos muy cortos, sin que en esta ocasión hubiera algún valor bancario que viniera a romper el equilibrio en favor de los avances. Los siete grandes quedaron bajo la presión vendedora y tuvieron que contentarse con repeticiones y algún pequeño retroceso que, esta vez, están más a tono con la sesión. Aún así, la facilidad con que se han absorbido las ventas ha sorprendido a los habituales, que esperaban -otra sesión llena de dudas y de partidas vendedoras, con lo que ha quedado un buen ambiente a la hora del cierre.