164 muertos al estrellarse dos aviones en la India

Ciento sesenta y cuatro personas murieron y otras cinco resultaron gravemente heridas en dos accidentes aéreos ocurridos ayer, con una hora de intervalo, en los Estados indios de Gujarat y Asam. La catástrofe, en la que se vieron involucradas dos aeronaves nacionales, fue la más trágica de la historia de la aviación india.

Un Boeing 737 de la compañía de vuelos nacionales Indian Airlines se estrelló cuando se disponía a aterrizar, procedente de Bombay, en la ciudad de Ahmadabad (Estado de Gujarat, al oeste del país). A bordo viajaban 129 pasajeros y seis miembros de la tripulación. Murieron 130 personas, entre ellos siete niños ysiete turistas cuyas nacionalidades aún no se conocen.El segundo siniestro ocurrió cerca de Guhawati (Estado de Asam, al norte de India), y en él murieron las 34 personas -31 personas y tres tripulantes- que ocupaban el aparato, un Fokker Friendship de la compañía Vayudoot, también nacional. El avión se precipitó a tierra después de haber despegado de la ciudad de Silchar, en el mismo Estado de Assam. El avión se dirigía a Guhawati, la principal ciudad de Assam, en el norte de la India. No hubo supervivientes.

Las causas de los dos accidentes eran, en la tarde de ayer, desconocidas. El Boeing, que llevaba en servicio 18 años, se estrelló a las siete de la mañana, hora local (10.30, hora peninsular española). El aparato chocó contra un árbol y un poste metálico del tendido eléctrico cuando le faltaban 15 kilómetros para llegar a la pista de aterrizaje. El impacto provocó el incendio del avión y su rotura en varios pedazos, que quedaron desperdigados por una extensa zona y de los que fueron rescatados los cuerpos sin vida de 130 personas.

Los cinco supervivientes, todos de nacionalidad india, fueron trasladados al hospital civil de Ahmadabad. Tres de ellos se encuentran en estado grave.

En un primer momento se pensó que la escasa visibilidad provocó la tragedia, pero, horas más tarde, funcionarios del aeropuerto de Ahmadabad indicaron que la niebla no era mayor que la habitual a esas horas. Se desconoce si hubo fallo humano o técnico. Un portavoz de Indian Airlines señaló que "el ritmo de descenso del aparato era demasiado rápido" y que, en el momento de entrar en la fase final de aproximación, "se encontraba más cerca del suelo de lo debido".