La policía 'inventa' en Valladolid un nuevo método de dispersión de manifestantes
Una treintena de apicultores que participaban en una manifestación en Valladolid el pasado viernes fueron dispersados por la policía en grupos de tres o cuatro a varios kilómetros y en distintas vías de acceso a la capital vallisoletana, cuando pretendían entrevistarse con el delegado del Gobierno en Castilla y León, Domingo Ferreiro.
Un centenar de policías antidisturbios obligó a los apicultores a abandonar el edificio de la delegación del Gobierno, siendo escoltados hasta los furgones policiales, según señaló uno de los manifestantes. Allí, los apicultores, según el mismo relato, fueron introducidos en los furgones en grupos de tres y cuatro y conducidos a distintos puntos de las carreteras de acceso a Valladolid y abandonados a distancias de entre cinco y siete kilómetros de la capital. En auto-stop y a pie los apicultores se reintegraron a la manifestación, en la que participaron unas 200 personas.
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