Los mercados reaccionan bien ante el déficit comercial

La balanza comercial estadounidense registró en agosto un déficit de 12.180 millones, excediendo las expectativas de los analistas que anticipaban un desfase de 11.300 millones. El déficit de julio, ya sorprendentemente bajo, fue revisado de 9.530 millones a 9.470 millones. Las exportaciones en agosto aumentaron un 3,9% mientras que las importaciones lo hicieron en un 10,4%, anulando la caída del 9% de julio.

Sin embargo, en contra de lo que cabría esperar, la reacción en los mercados, a excepción del dólar, no ha sido violenta, cediendo moderadamente tras las noticias, para luego recueprar el terreno perdido y situarse al alza. Los operadores comienzan ya a restar importancia a los datos mensuales y reconocen la realidad de que el desequilibrio comercial, si bien con altibajos, va por la senda correcta.

Según informa Shearson Lehman Hutton, el promedio en los últimos tres meses arroja una cifra de 10.800 millones frente a los 16.000 del año anterior. Asimismo se estima que 1988 finalizará con un desfase de 139.000 millones de dólares, lo cual es un 19% menor que en 1987. No obstante, la firmeza de las exportacioens e importaciones confunde a los economistas haciéndoles de nuevo dudar sobre el estado de la economía norteamericana y la amplitud de la deceleración sugerida por los últimos datos macroeconómicos.

Con ello, los mercados continuarán fluctuando en márgenes estrechos hasta obtener datos más conclusivos. A este respecto, el viernes se harán públicos el índice de precios al por mayor y la producción industrial.

En este contexto, los bonos del Tesoro de Estados Unidos mantuvieron su rentabilidad inalterada en torno al 8,9%, mientras que la Bolsa de Nueva York ganaba 7,12 puntos, cerrando a 2.133,36.