Cada español ve como media casi 12.000 anuncios de televisión al año
El Consejo de RTVE estudia incumplimientos de las normas publicitarias
El Consejo de Administración de Radiotelevisión Española ha manifestado en sus últimas reuniones su preocupación por la inclusión de contenidos publicitarios que rozan, y en ocasiones rebasan, la normativa sobre publicidad en TVE. Precisamente estos días, la revista Anuncios ha hecho públicos los datos del informe anual de la compañía McCann-Erickson, según los cuales cada español vio en 1987, como media, 11.749 anuncios en televisión.
Desde el año 1983, la empresa McCann-Erickson realiza un estudio anual sobre la incidencia de la televisión en el consumidor español. En el informe correspondiente a 1987 se han considerado por vez primera los diferentes canales autonómicos.Como dato global, el estudio concluye que, como media, cada español vio 32,19 anuncios diarios a través del medio televisión, lo cual supone una cantidad de 11.749,35 al cabo de! año. Esta cifra supone una subida importante sobre 1986 (28,2 al día), lo que se justifica en parte por el hecho de que ahora se consideren todos los canales televisivos en funcionamiento.El pasado año se invirtieron casi 125.000 millones de pesetas de publicidad en el medio televisión, especialmente en TVE-1 La gestión del departamento comercial de RTVE -la más agresiva que se haya realizado hasta el momento- y el boom publicitario que se vive en España han contribuido a aumentar de forma considerable la presencia de publicidad en TVE. Prueba de ello es la ampliación presupuestaria que el pasado año solicitó RTVE al Consejo de Ministros debido a la subida de más de 20.000 millones de pesetas sobre las previsiones realizadas inicialmente, que se acercaban a los 100.000 millones.
Pese al evidente éxito económico, el Consejo de Administración de RTVE ha manifestado en diversas ocasiones a la directora general de RTVE, Pilar Miró, su preocupación por el incumplimiento de la normativa publicitaria. El caso más conocido es el del concurso El precio justo, que contraviene flagrantemente puntos concretos de las normas sobre uso de la publicidad, como la que hace referencia a la clara diferenciación entre contenidos y mensajes comerciales.
Recientemente, el Consejo se mostró especialmente molesto con la forma de entender el patrocinio en los anuncios emitidos durante las retransmisiones de los Juegos Olímpicos de Seúl. La publicidad fue finalmente modificada eliminando el mensaje en el que se daba a entender que las retransmisiones se realizaban "gracias al patrocinio de las marcas", según explican fuentes del citado Consejo de Administración. Lo cierto era que la aportación de las marcas patrocinadoras apenas cubren una parte del presupuesto global que Televisión Española dedica a la cobertura del evento olímpico.
Propaganda engañosa
Otro de los puntos conflictivos discutido estos días es la profusión de anuncios realizados por marcas de tabaco que ocultan la promoción de sus productos, pero promocionan la marca. Esta publicidad intenta romper los límites que Televisión Española impone a la difusión del tabaco y, hasta el momento, el medio ha consentido su emisión sin cortapisa alguna.
Durante el pasado año, las marcas de bebidas, alcohólicas en buena parte, y de tabaco gastaron casi 15.000 millones de pesetas en televisión. Las bebidas, incluidas las alcohólicas, fueron en España el segundo sector en inversión publicitaria televisiva, tras el campo de la alimentación (casi 30.000 millones de pesetas en 1987).
La publicidad de tabaco fue el pasado año la más cara de cuantas se emitieron, seguida de las bebidas. El coste necesario para llegar al 1% de la audiencia fue de 195.783 pesetas, mientras el de las bebidas alcanzó la cifra de 144.410.
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