El emperador Hirohito recibe dos nuevas transfusiones de sangre
El emperador de Japón, Hirohito, recibió ayer dos nuevas transfusiones de sangre por un total de 400 centímetros cúbicos, continuando en una situación "grave", según anunció ayer Kenji Maeda, director de asuntos generales de la Casa Imperial. Entre tanto, su hijo y príncipe heredero, Akihito, presidió en su calidad de regente los actos oficiales de la festividad del equinoccio de otoño, mientras que unas 70.000 personas desfilaron por el Palacio Imperial y otros 12 puestos repartidos en todo el país reciben las firmas de simpatía de los japoneses para su veterano emperador.
En esta festividad nacional del equinoccio de otoño -que representa en esta ocasión un fin de semana de tres días para los japoneses- el emperador reza habitualmente por los espíritus del Palacio Imperial. Ayer fue el regente Akihito, de 54 años, quien presidió los actos oficiales a los que asistieron los miembros de la familia real, junto al primer ministro, Noboru Takeshita. El regente y su esposa, la princesa Michiko, visitaron después al emperador.Takeshita recibió, a continuación, un informe del equipo de médicos que vela por la salud del emperador, lo que no evita que continúen las "quejas" de algunos miembros del Gobierno y de los partidos políticos, por el "secretismo" que la Casa Imperial continúa guardando sobre la situación del emperador.
Las dos nuevas transfusiones sanguíneas aplicadas en la jornada de ayer, una por la mañana, de 200 centímetros cúbicos, otra por la tarde, por idéntica cantidad, se suman a las cuatro realizadas en la madrugada del pasado martes, cuando el emperador sufrió fuertes hemorragias. En total se han aplicado transfusiones por un equivalente a 1.600 centímetros cúbicos.
Según el portavoz de la Casa Imperial, esas dos nuevas transfusiones forman parte del "tratamiento previsto" y no constituyen ningún caso de "emergencia". Sin embargo, según expertos médicos entrevistados por el canal de la televisión privada TBS, "quizá serán necesarias nuevas transfusiones" para combatir el fuerte estado de anemia en que se encuentra el ilustre paciente.
Serial de televisión
Los especialistas recuerdan que, mientras dure la hemorragia interna, el emperador no podrá recibir ningún alimento sólido, capaz de combatir su anemia. Los médicos coinciden en que en el plazo de una o dos semanas se podrá determinar cuál es la evolución de Hirohito, que fue operado de un tumor intestinal el 22 de septiembre de 1987, sin que sea posible, dado el estado general del enfermo, una nueva intervención quirúrgica. El emperador continúa alimentado a través de sondas intravenosas. En la mañana de ayer el enfermo contempló uno de los seriales más populares de la televisión pública japonesa, la NHK, basado en epopeyas históricas.En el Palacio Imperial el lluvioso día comenzó y acabó con largas filas de japoneses que iban a firmar en los libros oficiales donde se registran los buenos votos por el emperador. Acudían muchas familias, al ser día festivo, predominando las personas mayores, que vivieron la época en que el emperador era considerado como un ser divino.
Muchos de ellos expresaban sus deseos para que el emperador se recupere, mientras que otros decían que era normal que una persona de tan avanzada edad se vea afectada por la enfermedad.
Preguntados los periodistas por la opinión de algunos diarios sensacionalistas británicos, que publicaron que al emperador "le espera su lugar en el infierno", por su pasado histórico durante la guerra, los japoneses calificaban de "muy mal gusto" y de "provocación" los calificativos de ciertos diarios británicos.
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