El Ayuntamiento de Alcorcón refuta las acusaciones de racismo de IU

El Ayuntamiento de Alcorcón, cuyo titular es el socialista José Aranda, refutó ayer las acusaciones de racismo vertidas contra esta corporación y contra la de Leganés por Izquierda Unida (IU). Francisco Herrera, portavoz de esta formación en el Ayuntamiento de Madrid, afirmó que de las declaraciones de los alcaldes de las localidades citadas "se deduce que no quieren tener gitanos cerca". La polémica ubicación de un campamento de gitanos ha sido el origen de estos enfrentamientos entre municipios y fuerzas políticas.

"Los responsables municipales de Alcorcón", se afirma en el comunicado de réplica a IU, "como ya se ha indicado repetidas veces, nunca han realizado manifestaciones de carácter racista, entre otras razones porque cuando el Ayuntamiento manifestó su oposición a las construcciones que se estaban realizando desconocían que fueran destinadas al colectivo gitano".Las autoridades municipales "nunca han manifestado estar de acuerdo o en desacuerdo con el llamado plan de realojamiento de gitanos". "Además" agrega la nota, "nunca se ha hecho referencia a asentamientos de gitanos y a campamentos, términos que consideramos que no son los que habitualmente se utilizan en la política social o urbanística que afecta a colectivos no gitanos"

"Lo que el Ayuntamiento de Alcorcón denunció en su momento, y posteriormente al surgir la polémica", precisa la nota oficial, "fueron las nulas condiciones del lugar elegido para que se proyectasen viviendas prefabricadas en él. A esto se unían dos razones: el lugar está contemplado en el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid como terreno de uso forestal, y sobre la finca colindante con el mismo, el Ayuntamiento de Alcorcón tiene solicitada su declaración como parque natural".

Por su parte, el concejal responsable de Urbanismo del Ayuntamiento de la capital, Jesús Espelosín, manifestó ayer que no hay una decisión firme sobre la ubicación del campamento de gitanos en el límite del municipio de Madrid con los de Leganés y Alcorcón. El emplazamiento de los campamentos será fijado en una próxima reunión de los presidentes de las juntas municipales de distrito. "Si la localización afectara a otros municipios, se hablaría previamente con ellos", dijo Espelosín.

El Ayuntamiento de Madrid, según la nueva configuración del Consorcio para el Realojamiento de la Población Marginada, debe encargarse de ceder el suelo para los campamentos, casas bajas y viviendas en altura, en donde serán instaladas las 2.100 familias que actualmente viven en distintos núcleos chabolistas de la capital. El Ayuntamiento es asimismo el encargado de construir los campamentos. Por último, se ocupará de la prestación de los servicios sociales.

La prestación municipal al nuevo consorcio, del que se ha descolgado el Ministerio de Obras Públicas, será debatida en el pleno de este mes. El otro miembro del consorcio, la Comunidad, se ocupará de la financiación de las viviendas.