Juan de Dios espera mejorar en Seúl el quinto puesto del Mundial-86

El seleccionador nacional de balonmano, Juan de Dios Román, hizo pública ayer la lista de 15 hombres que participarán en los Juegos Olímpicos de Seúl. Recuperados de sus lesiones Lorenzo Rico, Javier Reino y Juan Sagalés, el equipo no presenta grandes novedades, tan sólo la esperada ausencia de Cecilio Alonso. El seleccionador confía mejorar en la capital surcoreana el quinto puesto del Mundial de 1986 en Suiza.El equipo que partipará en Seúl está formado por los porteros Rico, Zúñiga y Fort, y los jugadores de campo Reino, Marín, Chechu, Uría, Gómez, Melo, Sagalés, Serrano, Ruiz, Cabanas, Puig y el capitán, Juan de la Puente. Quedan como suplentes los dos descartados del equipo que ha tomado parte en la fase de preparación: Alemany y Garralda. La selección se concentrará en Benicarló el 2 de septiembre, disputará dos encuentros amistosos frente a Túnez y el día 10 viajará a Seúl. Tras un encuento. informal con la URSS en la capital surcoreana, el día 20 iniciará la competición olímpica frente a Checoslovaquia. España ha disputado 12 encuentros de preparación durante el mes de agosto, con s lo tres derrotas, os e ellas ante la URSS.

Para Juan de Dios, el objetivo es mejorar el octavo puesto conseguido en Los Ángeles y el quinto del último Mundial A. El nivel de juego, los resultados y la condición física son correctos, y hemos cumplido todos los objetivos marcados". Sin embargo, en toda la expedición se palpa la ambición de conseguir una medalla. España está encuadrada en el grupo B, junto a Hungría, Alemania Orienta¡, Checoslovaquia, Japón y Corea. El nivel de los equipos es parejo -Japón parece más débil-, gracias a que las dos selecciones más potentes, la URSS y Yugoslavia, se encuentran en el grupo A.

Rivales

Los rivales más directos de España serán Checoslovaquia y Hungría. Estos dos equipos, sin embargo, no cuentan con grandes reservas físicas por la elevada media de edad de sus jugadores. La RDA tiene un nivel muy ligeramente inferior al español y Corea puede ser la gran sorpresa del torneo porque juega ante su público y porque ha armado un equipo rápido y muy agresivo en ataque para compensar la falta de envergadura de sus jugadores. El primer clasificado del grupo disputará la final olímpica y el segundo jugará por el bronce.El seleccionador nacional reconoce un "sentimiento de revancha en el equipo" con respecto a Los Ángeles y al Mundial de Suiza. "Para Los Ángeles nos clasificamos de rebote [por el boicoteo de los países del Este], mientras que ahora hemos hecho una preparación detallada, con tiempo y seria, y nos encontramos además con una generación de jugadores que se encuentra al final de su carrera en la selección y quiere cerrarla con una aportación extraordinaria".