Manifestaciones masivas en Birmania exigiendo democracia
Manifestaciones masivas en las principales ciudades birmanas, cifradas en varios centenares de miles de participantes, y una nueva huelga general, fueron la respuesta ayer a la designación de Maung Maung como nuevo presidente del país -designado el pasado viernes por el Partido Birmano de Programa Socialista (PBPS) en sustitución de Sein Lwin- y reiterando las exigencias de democratización del país.Fuentes diplomáticas occidentales en Rangún, contactadas telefónicamente desde Bagkok, informaron que miles de personas volvieron a concentrarse ayer ante el hospital general, punto de encuentro de los manifestantes antigubernamentales, para marchar posteriormente hacia el centro de la ciudad, mientras grupos procedentes de ciudades cercanas eludían los controles de carretera establecidos por el ejército para participar en las protestas.
Durante el pasado fin de semana, inmediatamente conocida la designación de Maung, los estudiantes habían convocado la "huelga nacional" de ayer y nuevas concentraciones. En las manifestaciones de ayer, estrechamente vigiladas por 30.000 soldados, a los estudiantes, monjes y trabajadores -protagonistas de las manifestaciones de las últimas semanas cuyo balance de víctimas superó los 3.000 muertos- se sumaron funcionarios, intelectuales, artistas, estrellas de cine y abogados y médicos vestidos con sus atuendos profesionales, confirmando que la protesta popular en demanda de algo más que cambios en la cúpula del partido único del país incluye ahora un amplio conjunto de capas sociales.
Asimismo, grupos de manifestantes se concentraron ante la embajada de Estados Unidos en la capital birmana, ante la vigilancia de las fuerzas de seguridad birmanas que tampoco llegaron a intervenir.
En Mandalay, segunda ciudad del país -situada a 600 kilómetros al norte de Rangún- y cuna del nuevo dirigente Maung Maung, se manifestaron entre 700.000 y 800.000 personas, según la agencia japonesa Kyodo, que informó de la existencia de incidentes entre manifestantes y fuerzas de seguridad, aunque sin precisar si hubo o no víctimas.
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