Los paramilitares protestantes asesinan a dos católicos en el Ulster

Dos personas murieron ayer en Belfast, víctimas de un ametrallamiento indiscriminado que la policía atribuye a los grupos paramilitares protestantes. El atentado llega cuando portavoces próximos al Ejército Republicano Irlandés (IRA) habían invitado a celebrar una semana pacífica tras la oleada de atentados de los últimos días.El atentado de ayer se produjo a primera hora de la tarde en el norte de Belfast, en el distrito de Ardoyne. Individuos armados dispararon indiscriminadamente cuando circulaban a bordo de un automóvil por una calle comercial. Un joven de 18 años fue asesinado a corta distancia cuando se encontraba en la puerta de un club. El conductor de una furgoneta de reparto de cervezas, que se interpuso en el camino del vehículo en el que huían los autores, del atentado fue también asesinado.

La policía norirlandesa achacó la acción a un intento de venganza de los grupos paramilitares protestantes tras la campaña de atentados iniciada por el IRA el lunes de la pasada semana, que se cobró cinco muertos y 28 heridos. A la lista de víctimas hubo que añadir ayer la de un cabo del Ejército británico que murió como consecuencia de las heridas que sufrió en un atentado de hace tres semanas.

La acción de los paramilitares lealistas llega un día después de que Gerry Adams, presidente del Sinn Fein, la rama política del IRA, llamase públicamente a respetar la paz durante esta semana, cuando el bastión católico del oeste de Belfast, del que Adams es parlamentario, celebra la primera edición de un festival folclórico.

El llamamiento de Adams era ayer juzgado en Belfast como una señal de la preocupación entre los sectores católicos y republicanos por el clima creado por la última campaña de atentados del IRA.