"España tiene que llenar el vacío indio", asegura el secretario de Exteriores de Rajiv Gandhi
"El peso político que la democracia española ha alcanzado en la esfera internacional en los últimos años no te permite mantener en su diplomacia el agujero de la India", declaró a EL PAÍS Alfred Gonzalves, secretario de Estado de Exteriores indio. Gonzalves ha sido uno de los altos funcionarios que acompañaban al primer ministro, Rajiv Gandhi, en su visita de tres días a España, finalizada ayer. Asegura que el viaje ha sido "muy positivo" y que, con la voluntad de los dos Gobiernos, puede convertirse en el arranquede unas relaciones que, según otro miembro de la comitiva, "son buenas porque no existen".
Gonzalves, que viajó por primera vez a España hace 33 años, señala que la democracia que ahora goza el país ha causado una impresión "muy favorable" a Gandhi. El diplomático recuerda que Jawaharlal Nehru, el primer jefe de Gobierno de la India y abuelo del actual primer ministro, estuvo en España durante la guerra civil y "sintió profundamente el dolor de España, porque la libertad conforma el centro del pensamiento indio".India, que tras su independencia de la corona británica, en 1947, optó por unirse a la Commonwealth como república, quiere ampliar su cooperación con la Comunidad Europea. "Estamos complacidos de ver cómo el ingreso de España ha contribuido a la estabilidad de Europa, y esperamos que este marco facilite también nuestros contactos".
Gonzalves señaló que durante la presidencia alemana de la CE, finalizada el 30 de junio pasado, se ha establecido un diálogo directo entre la CE y la India. "Felipe González ha invitado a India a establecer otro contacto directo durante la presidencia española, en el primer trimestre de 1989", afirmó.
India busca en la CE un apoyo internacional para la lucha contra el terrorismo que sacude a la democracia más poblada del mundo (800 millones de habitantes). Según Gonzalves, "si no existe una coordinación total, es imposible detener este fenómeno porque el terrorismo tiene sus propias vías de internacionalización. España e India tienen un interés común en frenarlo y existe una voluntad de coordinar acciones a través de la Comunidad Europea". Para Gonzalves, el terrorismo que padece India es "más grave" que el español, especialmente el sij, porque cuenta con un respaldo internacional de ciertos sectores en el Reino Unido, Canadá y Estados Unidos, y en particular con el apoyo del Gobierno de Pakistán.
Nacido en un pueblecito al sur de la ex colonia portuguesa de Goa, católico, de 56 años, Gonzalves ataca al fundamentalismo religioso sij, que acusa al Gobierno indio de haber acabado con el Estado secular que proclama la Constitución. "Soy de una de las minorías más pequeñas, los cristianos apenas sumamos 22 millones en toda la India, y no es porque sea miembro del Gobierno, pero mis derechos son respetados plenamente", asegura.
En la perspectiva de este corto encuentro bilateral entre la India y España han surgido numerosos campos en los que la cooperación es posible. "Está todo por hacer; el camino es largo, pero creo que ya hemos puesto la primera piedra", dice el diplomático.
Coincidencias políticas
Nueva York es la nueva cita de los jefes de la diplomacia de los dos países en otoño próximo durante la Asamblea General de la ONU. Políticamente, ambos Gobiernos parecen haber descubierto que comparten muchos puntos de vista y que la cooperación es posible. "España e India piensan que en un momento en que las superpotencias hablan de desarme, el. mundo se está inclinando hacia el Movimiento de los No Alineados, y es muy importante darle más coherencia. Nueva Delhi mantendrá un diálogo regular con Madrid, no como India, sino como parte de los no alineados", aseguró Gonzalves.
Para el Gobierno de Gandhi es un "atraso" que un país que ha alcanzado el grado de poder económico que Madrid tiene en la actualidad "no invierta en otro país que ofrece unas posibilidades inmensas de desarrollo". El sector nuclear, las industrias aeronaúticas, pesqueras y de defensa son algunas de las vías de cooperación estudiadas aunque no se hayan plasmado en acuerdos concretos.
Catedrales sin visitantes
Lo que más ha sorprendido al primer ministro indio, Rajiv Gandhi, y a la delegación que le ha acompañado a Madrid es que menos del 1% de los más de 45 millones de turistas que llegan a España cada año visitan las catedrales y los numerosos enclaves culturales del país. Gandhi, que aprovechó unas horas de la visita oficial para trasladarse en viaje privado a Toledo, no parece comprender cómo el sol es el principal atractivo de España."Tenemos que aprender cómo se consigue atraer a tanta gente para tumbarse en las playas", afirma Gonzalves, antes de que ayer emprendieran viaje a Turquía, donde finaliza la gira que les llevó también a Jordania y Yugoslavia.
India, que recibe cuatro millones de visitantes por año, de los que sólo un millón se pueden considerar como turistas, ha basado toda esta industria en el interés por su cultura milenaria. Templos, palacios, esculturas de dioses de mil brazos, de danzarinas y de elefantes resumen la publicidad del país que ocupa el surcontinente asiático y que tiene miles de kilómetros de costas al golfo de Bengala, al oceano Indico y al mar Arábigo.
En esta búsqueda de cooperación con España en materia turística, India se ha comprometido a reducir las altas cuotas de aterrizaje que debía pagar la compañía aérea Iberia, motivo por el que la aerolínea española optó por no volar a ese país. Bombay o Nueva Delhi, o tal vez las dos capitales, se vislumbran ahora como próximos destinos de Iberia.
El Gobierno indio es consciente de que el transporte supone uno de los puntos principales de la infraestructura turística, y quiere empezar por facilitar a los españoles el viaje a India, ahora que parece abrirse una nueva etapa en las relaciones entre las dos naciones. Este enorme país de más de tres millones de kilómetros cuadrados tiene las puertas abiertas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Españoles extranjero
- Turismo extranjero
- Rajiv Gandhi
- Política turística
- Turismo internacional
- Rutas turísticas
- Extranjeros
- India
- Viajes
- Relaciones económicas
- Política exterior
- Destinos turísticos
- Unión Europea
- Organizaciones internacionales
- Migración
- Relaciones exteriores
- España
- Ofertas turísticas
- Demografía
- Turismo
- Sociedad