El juez ordena la prisión incondicional de Amedo y Domínguez como presuntos organizadores de los GAL

Los policías José Amedo Fouce y Michel Domínguez Martínez ingresaron ayer en la prisión de Logroño, de forma incondicional, por orden del juez de la Auidiencia Nacional Baltasar Garzón, que investiga la implicación de policías e instituciones con los GAL. El juez afirma en su auto que los dos policías aparecen como los principales organizadores de esa banda terrorista, que desarrolló su actividad entre 1983 y 1987, y añade que está documental y testificalmente comprobada su participación en la preparación, desarrollo y ejecución en dos atentados cometidos en febrero de 1986 en el sur de Francia (bares Batzoki y Consolation). El magistrado enviará en breve la causa a la sala para que decida sobre el procesamiento de los policías.

Los dos policías habían sido citados a declarar ayer por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón como supuestos inculpados en las actividades de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL). En esa misma situación se encuentran el director general de la Policía, José María Rodríguez Colorado, y varios de sus subordinados, como el jefe Superior de Policía de Bilbao, Miguel Planchuelo.El auto que decreta la prisión incondicional de Amedo y Domínguez explica que ambos "aparecen como los principales organizadores de los denomina dos Grupos Antiterroristas de Liberación, que desarrollaron su actividad delictiva entre los años 1983 y 1987, proyectando la forma en que debían ejecutarse los diversos hechos delictivos, financiando o sirviendo de medio de financiación a aquellos, formando la infraestrcutura. de la organización, llevando a cabo los contactos que fueran precisos y reafianzando todas las actividades necesarias para el funcionamiento de aquella".

El documento judicial pormenoriza el viaje oficial. de Amedo a Portugal de enero-febrero de 1986, pagado con fondos reservados del Ministerio del Interior, en el que el subcomisario de policía reclutó a mercenarios portugueses, que llevaron, a cabo los atentados contra el bar Baztoki y Consolation en el sur de Francia los días 8 y 13 de febrero de ese año.

En contra de los informes del Ministerio del Interior, el juez establece probado que el inspector Michel Domínguez acompañó a Amedo en ese viaje desde Lisboa hasta el País Vasco. Domínguez incluso alquiló la habitación 350 en el hotel Nervión de Bilbao, con un DNI falso a nombre de Antonio García Arana, sin estar autorizado por sus superiores.

Sorpresa de Argote

Jorge Argote, el abogado de los policías y del Ministerio del Interior, tras conocer el auto de prisión, manifestó a los periodistas congregados en el tribunal su sorpresa por el hecho, y afirmó que "a ningún miembro de ETA se le persigue así en la Audiencia Nacional". El letrado dijo estar convencido de que sus defendidos estarán en libertad en dos o tres meses, y arremetió contra el juez que instruye el caso. Argote dijo que las preguntas formuladas a los policías fueron "un alegato de acusaciones por parte del juez", y definió la decisión del ingreso en prisión como "un ordeno y mando" sin exponer las causas ni dar explicaciones. Argote llegó incluso a calificar de injusta la decisión del juez.

Por su parte, el abogado de la acusación popular Fernando Salas se mostró satisfecho por la medida "inexcusable" ordenada por el juez, "dado que las leyes están hechas para todos los ciudadanos". Salas elogió el valor, la entereza y la escrupulosa actuación del juez Garzón. "Es", dijo, "muy dificil encontrar un juez tan respetuoso, escrupuloso y puntilloso con los derechos de las partes, y Argote lo sabe".

El abogado de la acusación popular calificó de "sandez" la apreciación de Argote sobre que el interrogatorio de los policías, que se negaron a declarar, fue un alegato de acusaciones.Salas advirtió que es probable que en breve se orqueste una campaña perfectamente organizada para desacreditar al juez Garzón y a las partes personadas en este proceso, pero "estamos acostumbrados a determinadas actuaciones

"Suspendidos de funciones

Nada más conocer la orden de prisión dictada por el juez, la Dirección General de la Policía suspendió de sus funciones a los dos policías supuestamente implicados en la organización de los GAL. Los dos policías tenían abierto un expediente administrativo, del que no se ha derivado ninguna sanción por el momento, dado que el departamento se inhibe hasta que exista una resolución judicial.

Fuentes oficiales de la Policía aseguraron ayer que la resolución administrativa puede llevar hasta la expulsión del cuerpo de los dos policías.

Fuentes próximas al caso han calificado la actuación del juez como "independiente y valiente" dado lo delicado del asunto y el cúmulo de pruebas obtenidas por Baltasar Garzón, también a través de la colaboración de la justicia portuguesa y la francesa.

Dichas fuentes consideran que la investigación sobre este asunto no ha culminado aún, y que puede afectar a niveles superiores del departamento de Interior, que dirigía hasta hace unos días José Barrionuevo.

También han asegurado que el juez Garzón enviará la respuesta de Barrionuevo sobre los fondos reservados al Consejo General del Poder Judicial, para que éste decida lo que estime oportuno, dada la negativa del hasta ahora ministro del Interior a facilitar datos sobre los fondos reservados.