Carolina Herrera

Proviene de una antigua familia colonial terrateniente de Venezuela. Su padre, un pionero de la aviación venezolana, fue gobernador de Caracas y ministro de Relaciones Exteriores. Hace siete años, Carolina Herrera decidió, por "una necesidad interior", lanzarse al mundo de la moda. Y lo hizo en Nueva York, sabiendo que era una plaza difícil aunque tremendamente importante. Hoy está considerada entre los mejores diseñadores de moda en Estados Unidos, donde cuenta con clientes como Nancy Reagan y Jacqueline Kennedy. De su boca no salen los nombres de las personas que lucen sus modelos. "Mis vestidos se tienen que vender por sí solos y no por los famosos que los eligen".

Quizá debido a su delgadez y a su casi perfecta rigidez en el rostro no aparenta los 48 años que tiene. Madre de cuatro hijas y abuela por tres veces, de Carolina Herrera se desprende un aire aristocrático. Su familia, tanto por la rama materna como paterna, ha dado en el pasado varios presidentes a Venezuela, donde ha vivido de manera permanente hasta hace siete años cuando decidió hacer su aparición en el mundo de la moda Por su pertenencia a una familia adinerada, había visitado muy asiduamente la ciudad de Nueva York y sabía de las dificulta des en abrirse el camino del éxito, pero también que los triunfos neoyorquinos tienen un eco espectacular y "te abren las puertas de cualquier parte del mundo". En sólo siete años ha conseguido un puesto entre los mejores diseñadores de Estados Unidos y ha obtenido diversos premios, como la elección, hace pocos meses, de "la mejor" en la llamada Noche de las Estrellas.Tiene su taller en el corazón de Manhattan, desde donde atiende a sus famosas clientas ¿Quiénes son los personajes que lucen sus modelos? Carolina Herrera esboza una sonrisa y haciendo gala de un gran dominio de la diplomacia, dice: "Mis modelos tienen que venderse por sí solos y no porque los lleve ningún personaje famoso". Se sabe, sin embargo, que Nancy Reagan, esposa del presidente Reagan, y Jacqueline Kennedy son algunos de ellos, y que también Carolina Herrera fue la encargada de elaborar el traje de novia que lució el día de su boda Caroline Kennedy, hija de Jacqueline y del presidente norteamericano John Kennedy, asesinado hace 25 años.

Casada con un rico terrateniente y editor también venezolano, Reinaldo Herrera, Carolina se define como una mujer disciplinada y trabajadora y, como buena Capricornio, muy organizada, a la que le gusta hacer muchas cosas al mismo tiempo, como escuchar ópera y jugar al tenis.

En España, país que visita asiduamente y en el que mantiene todavía lazos familiares de sus antepasados españoles, no ha presentado ninguna colección, pero en su visita de esta semana ha iniciado el lanzamiento de un perfume que lleva su nombre. Para ella, los olores y las flores han tenido desde siempre una gran importancia. Dice que uno de sus primeros recuerdos de infancia en la hacienda familiar venezolana fue el del olor a jazmín, sobre todo cuando empieza a anochecer. Con base en esta flor, Carolina Herrera ha elaborado su perfume personal.