Hasta que la muerte les separe
En el viejo Hollywood -adjetivo ambiguo donde los haya este de viejo, porque igual vale para un Griffith de 1916 que para un Minnelli de 1963- era frecuente hallar películas que aludían, sin siquiera mencionarlo, al sexo y sus batallas eternas, y lo hacían, en su velado y tangencial guiño, con un desgarro que difícilmente ha vuelto a superarse. Ahí está Lubitsch, maestro de maestros en las pícaras artes de lo caliente. Ahí está El hombre tranquilo, de Ford, con ese plano final de Maureen O'Hara susurrando a John Wayne al oído lo que le espera sólo cruzar el umbral de la cabaña; una película que le da ciento y raya a Nueve semanas y media en eso de la sumisión de un sexo al otro. Y ahí está La costilla de Adán, formidable comedia con Katharine Hepburn y Spencer Tracy encarnando a ese matrimonio unido hasta que la muerte les separe, aunque de momento les separen diferencias insalvables, de esas que todo quisque con alianza entre los dedos conoce y que le hacen a uno dormir más de una noche en el sofá.La credibilidad de Tracy y Hepbum como pareja es indudable, y el guión -letras de oro de ese formidable matrimonio, taimbién ellos, que fueran Garson Kanin y la actriz Ruth Gordon-, de una total sutileza, lía el ovillo de manera que no sólo en los quehaceres domésticos y en la concepción de la institución matrimonial sus personalidades van a chocar, sino que también se alzarán en pie de guerra en el terreno profesional: ambos son abogados y ambos habrán de participar en el mismo caso, el juicio contra una mujer que ha intentado matar a su marido por un par de cuernos bien puestos (ahí hay que señalar dos excelentes actores: Tom Ewell como el marido agredido y, sobre todo, la encantadora y trágicamente efímera Judy Holliday, una robaescenas de cuidado, memorable en su papel de agresora). Él, tomando las riendas de fiscal; ella, salida ya a flote su veta feminista, defendiendo a la acusada.
Dirigió el filme con mano maestra George Cukor, quedando como una de sus mejores películas y, sin duda, como la mejor de la pareja hoy objeto de ciclo.
La costilla de Adán se emite hoy, a las 23.00, por TVE-1.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.