Las bolsas esperan apoyos externos

La ausencia de compromisos por parte de los inversores continúa siendo la única característica de estas sesiones en las que los mercados intentan no deteriorar demasiado su imagen. Dinero y papel vuelven a competir en sus intentos de no alterar las cotizaciones, aunque la presencia de compradores suele traducirse en una subida fuerte de los precios. Esta situación está llevando a las bolsas, no obstante, a un desgaste que puede concluir en una salida de papel más abultada que las anteriores. El índice general del mercado madrileño se ha situado, tras la baja de ayer, en el mismo nivel que el cierre del mes anterior, 270,91%, con lo que los resultados de abril dependerán de lo que suceda esta mañana.La actividad en los corros continúa siendo la indispensable, con lo que el volumen del negocio se mantiene en torno a los 9.000 millones de pesetas efectivas diarias.

Junto a los valores bancarios, son las constructoras y las químicas las sociedades que más atraen a los inversores, pero siempre sin arriesgar posiciones.

Dentro del sector químico ha destacado la subida de Campsa, un 20%, que sumada a la anterior han hecho saltar la cotización casi un 50%. Los rumores sobre una ampliación de capital están detrás de estas subidas, lo cual coincide con la actual filosofía del mercado, pues sólo se toman posiciones al calor de rumores sobre fusiones, ampliaciones y otras operaciones similares.

La situación al cierre era exactamente igual a la del día anterior, aunque en esta ocasión hay algunas expectativas ante el posible recorte del precio de los combustibles. El mercado se divide entre los que opinan que la rebaja ya está descontada y aquellos que esperan un rebote de los precios aprovechando el impacto de la noticia. En cualquier caso, parece que todo quedaría reducido al ámbito semanal.