El nuevo presidente de Imepiel asegura que no privatizará la empresa

José Guill, nuevo presidente del Consejo de Administración de Industrias Mediterráneas de la Piel (Imepiel), la antigua Segarra, afirmó ayer que no tiene ninguna instrucción precisa sobre una eventual venta de esta empresa pública al sector privado. No obstante, Guill señaló que el Gobierno ya había manifestado en diversas ocasiones que es preferible que esté adscrita al sector privado. Imepiel se dedica a la fabricación de calzado y es la empresa mayor de España en ese sector, con 1.458 trabajadores.

"La ausencia de Valor estrátegico",dijo, "y el hecho de que el calzado ya esté atendido por el sector privado han sido los motivos alegados por el Gobierno. Es una decisión que a mí no me compete como presidente del consejo de administración. Que yo sepa, en estos momentos no hay nada preparado de cara a una posible privatización".Guill, de 47 años de edad y hasta la fecha jefe. del área industrial de la subdirección de empresa del Ministerio de Hacienda anuncié que su objetivo fundamental es reducir las pérdidas que ha registrado Imepiel en los últimos años y que en el pasado ejercicio de 1987 ascendieron a 2.017 millones de pesetas. Para lograr este objetivo, el nuevo presidente de Imepiel se mostró partidario de implantar nuevos sistemas organizativos de producción y de poner en marcha un plan de viabilidad. Éste incluiría el fomento de nuevas líneas de productos, la variación del proceso productivo y el fortalecimiento de los mercados institucionales. Entre estos mercados José Guill citó las fuerzas armadas, tanto nacionales como extranjeras, y grandes empresas y organismos públicos. En opinión de José Guill, la principal ventaja de Imepiel radica en su gran dimensión, lo que le permite conseguir grandes series de producción y unos estimables precios unitarios.

En cualquier caso, el nuevo responsable de Imepiel subrayó la necesidad de que la empresa sea rentable al margen de que se encuentre en el sector público o en el privado. Destacó que no cree que la reducción de plantilla sea una solución. Ante la reciente sentencia del Tribunal Central de Trabajo que sanciona la homologación del convenio de esta compañía pública con el sector privado del calzado, Guill avanzó que es probable que la dirección de la empresa la recurra.