La Bolsa de Nueva York sufrió ayer otra importante caída

La extremada fortaleza del yen frente a la divisa norteamericana, que ha caído en los principales mercados de cambio, traspasando en Tokio el nivel crítico de 126,85 yenes a pesar de las intervenciones del Banco de Japón, ha provocado importantes bajas en los mercados estadounidenses tanto de obligaciones como de renta variable.La Bolsa de Nueva York registró un descenso en, el índice Dow Jones de 43,77 puntos quedando a 2.023,87. A media sesión la caída se acercó peligrosamente a los 50 puntos, nivel a partir del cual se suspende el sistema informático de alta velocidad de entrada de órdenes, con objeto de limitar los arbitrajes relacionados con los mercados de futuros.

Este ambiente pesimista está justificado, además de la debilidad del dólar frente al yen que puede llevar a las instituciones japonesas a liquidar sus posiciones en los mercados financieros nortemaericanos antes del cierre del ejercicio el próximo, día 31.

Al mismo tiempo puede tener consecuencias inflacionistas, como demuestra la preocupación del jefe de la Reserva Federal, que le ha llevado a restringir ligeramente las condiciones crediticias.

Otro de los motivos de preocupación es el crecimiento económico, por encima de lo calculado, que puede dificultar la reducción de las importaciones, echando por tierra las mejoras alcanzadas en el déficit de la balanza comercial.

A pesar de estas circustancias los principales brokers, como Shearson Lehman Hutton, no creen que se vaya a desembocar en una nueva crisis bursátil, teniendo en cuenta además, que los meses de enero y febrero son estacionalmente buenos para el déficit comercial, a lo que hay que añadir que el fuerte crecimiento económico se ha producido, en su mayor parte, por el sector exportador, con un crecimiento del 30% en los últimos seis meses. La Bolsa de Londres también registró perdidas importantes rebajando el nivel 1.800 en el índice Financial Times.

En otro orden de cosas, el giro copernicano dado por los responsables de Arabia Saudí desmintiendo sus declaraciones anteriores sobre la venta de crudo con descuento a clientes europeos y japoneses, junto a la reafirmación de su solidaridad con la OIPEP y el anuncio por parte del presidente de esta organización de la reunión que mantendrá en Viena durante los primeros días de abril el comité de precios, provocaron ayer un nuevo tirón de los precios del petróleo.