EI presidente del Parlamento cantabro presentará una querella contra Hormaechea

El presidente de la Asamblea regional de Cantabria, Eduardo Obregón, anunció ayer que presentará una querella contra el presidente del Gobierno autónomo, Juan Hormaechea, por falsas acusaciones relacionadas con la grabación de cintas magnetofónicas en el Parlamento cántabro. Hormaechea ha acusado a Eduardo Obregón de atentar contra la intimidad de losdiputados mediante las grabaciones.

Obregón sancionó, el pasado día 10, a Hormaechea y, al consejero de Industria y Turismo, Gonzalo Piñeiro, a diez días de suspensión en sus cargos de diputados por insultar al parlamentario del CDS Manuel Garrido, insultos que fueron recogidos en las cintas.Según Eduardo Obregón, Hormaechea pretende con sus acusaciones distraer a la opinión pública de la gravedad de su actuación en el hemiciclo. Para el presidente del Parlamento regional, "los insultos no fueron proferidos en el curso de una conversación privada, sino que fueron dirigidos a la persona a la que se trataba de injuriar". Obregón agregó: "No he dado nunca orden de semejantes grabaciones. Estas pertenecen a la práctica parlamentaria de registrar todo lo que se produce en el recinto de los plenos, para posteriormente recogerlo en un diario de sesiones distinto al acta".

Durante el pleno de la Asamblea del pasado lunes, convocado para debatir las enmiendas a los Presupuestos Generales para 1988, al que podían asistir los diputados sancionados, el consejero de la Presidencia, Roberto Bedoya, pidió que no se utilizaran los sistemas de megafonía de los escaños. El socialista Juan González Bedoya se dirigió a la presidencia pidiendo la, no alteración de "una práctica, habitual reconocida por todos los Parlamentos". Hormaechea y Roberto Bedoya optaron por desconectar sus micrófonos y depositarlos en el suelo, donde permanecieron durante toda la sesión.

Obregón afirmó ayer que la empresa que montó la megafonía en el hemiciclo mostrará próximamente a los medios informativos su funcionamiento. "Si el sistema imposibilita la intimidad y vida privada de los diputados mientras permanecen en el escaño, yo estaría obligado a corregir esas instalaciones. Pero es la primera vez que se me habla de semejante riesgo; por ello insisto en que Hormaechea sólo pretende distraer a la opinión pública con estas cuestiones".