Jean-Marie Pfaff: "Yo no voy a llevar botes de humo ni piedras al Bernabéu"

Jean-Marie Pfaff se ha cruzado en los últimos años en el camino del fútbol español. Y lo ha hecho bajo el signo de la polémica. Pfaff puso nervioso a Eloy y le paró el penalti que impidió a España llegar a las semifinales en el Mundial de México, y Pfaff vuelve el próximo miércoles al Bernabéu, al escenario de su penúltima batalla con el Real Madrid. Una guerra que tuvo especial virulencia con los ultrasur, que supuso la eliminación madridista en las semifinales de la Copa de Europa del pasado año y una grave sanción al Madrid. Pfaff niega en esta entrevista, concedida en su domicilio de Múnich a un enviado especial de EL PAÍS, tener algo de culpa en lo ocurrido. Claro que también niega ser un experto en el arte de los cortes de manga: "Ni llevé el año pasado ni voy a llevar ahora botes de humo, piedras o botellas al Bernabéu".

Pregunta. ¿Siente algún nerviosismo antes de situarse de espaldas al fondo sur del Bernabéu?Respuesta. Lo que ocurrió el año pasado fueron unos hechos aislados, porque no es nada inteligente por parte de ningún club tener a ese tipo de individuos en los fondos. Pero yo he jugado otras veces en Madrid y sé que es un público entendido, aunque también que se vuelve más pasional -¿como se dice en España?-, sí, en las noches europeas del Bernabéu.

P. ¿Le preocupa que se repitan los incidentes del año pasado?

R. No creo que pase nada grave, no debe volver a ocurrir porque ya ha habido un castigo que ha sido un duro, escarmiento para el Madrid por culpa de esos pocos individuos. El club no va a olvidar nunca que tuvo que jugar a puerta cerrada con el Nápoles y en Valencia contra el Oporto. Y si ocurre algo grave otra vez la UEFA volvería a cerrar el campo. Ésa no es la imagen que el Real tiene en Europa. Yo sé que el Madrid no es así.

P. ¿Por qué contribuyó usted a exasperar a los ultras?

R. Yo no hice nada, salvo esquivar con la cintura todas las cosas que me tiraban.

P. En el Madrid le consideran un provocador.

R. ¿Provocador? Estaría loco si acudiera a provocar al Bernabéu. Tendría que ponerme en el centro del campo y yo juego de portero. Mire, yo no voy a llevar botes de humo para tirárselos a nadie, ni piedras, ni botellas. Yo voy a jugar al fútbol. En España, la gente tiene buena cabeza y sé que se piensa, en general, muy bien de mí. Tengo fans en España y en México, como se demostró en el último Mundial. Yo no voy a salir ni enfadado ni nervioso. Provocadores son algunos jugadores que se tiran al suelo, que simulan lesiones, que buscan caídas para engañar al árbitro y encender al público.

P. ¿Le cae mal Hugo Sánchez, verdad?

R. No es cosa de dar nombres, pero sí, la verdad es que Hugo es de ese tipo de jugadores. Amancio, Maradona, Santillana son jugadores fuertes pero legales en su forma de actuar. Y ya ve que le digo Amancio y Santillana, que son madridistas. Pero es que al Madrid le han hecho grande no sólo sus éxitos deportivos, sino la forma elegante de actuar de este tipo de jugadores.

La violencia de Juanito

P. ¿Y que opina de lo que hizo Juanito con Matthaus en el choque de Múnich de la temporada anterior?R. Lo de Juanito fue un mal ejemplo para los jóvenes. Durante un partido, y más de la tensión con la que se viven eliminatorias tan importantes como las europeas, hay fases de muchos nervios, pero no se puede llegar a lo que él hizo, a piso tear a un contrario cuando estaba en el suelo. Fue una acción violenta y vil.

P. ¿Por qué es tan aficionado a los cortes de manga?

R. ¿Como dice?

P. Que en el vídeo del año pasado queda claro que es un especialista en este tipo de gestos.

R. Yo no hice ninguno.

P. ¿También está dispuesto a negar que es la bestia negra del fútbol español?

R. ¿Como un monstruo? (¡Ja, ja!). No soy tan feo, al contrario. Carmen, mi mujer, dice que soy guapo y que tengo una sonrisa encantadora. Yo soy Jean-Marie Pfaff, aunque como profesional defiendo lo mío sin pensar en quién tengo enfrente.

El penalti de Eloy