Ahorcado públicamente.
Mohammad Ahsan, culpable de haber asesinado a un niño de cinco años para entregarle la sangre a su novia, pende de una cadena tras ser ahorcado públicamente en Multan (Punjab, centro de Pakistán). Un trípode fue levantado en el estadio municipal y Ahsan fue colgado ante 10.000 personas por un crimen cometido hace años, cuando la novia le pidió que para probarle su amor le presentara un cuenco con su propia sangre.
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