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Hacienda investiga a fondo los ingresos de cerca de 200 deportistas y clubes

Luis Gómez

El futbolista alemán occidental Bernd Schuster es el primer deportista cuyo expediente ha sido trasladado por una delegación de Hacienda, en este caso la de Cataluña, a la Fiscalía del Estado por entender la primera que existe "un posible delito fiscal". El plan nacional elaborado por el Ministerio de Hacienda para evaluar la situación fiscal del deporte español afecta durante 1988, año en el que se pone en ejecución, a un total de 200 personas, entre naturales y jurídicas. La lista está calificada de "muy selectivo, y afecta a las figuras que más ingresan en los principales deportes. Los clubes e baloncesto han llegado a filtrar que su deuda con Hacienda puede superar ampliamente los 500 millones de pesetas.

El número de clubes y deportistas puede incrementarse según avancen los datos y su resultado recomiende nuevas inspecciones. El plan afecta tanto a deportistas españoles como extranjeros. Respecto a estos últimos, como puede ser el caso de baloncestistas norteamericanos, tiene cierta urgencia por tratarse de personas que pueden cambiar de residencia o de país de, trabajo de un año para otro.La actuación de Hacienda se centra en clubes y jugadores en los deportes que más cantidades mueven, caso del fútbol y el baloncesto, mientras que en otros el trabajo se desvía hacia nuevos campos de actuación. El plan nacional se ejecutará a lo largo del presente año y se ha efectuado con la información recogida en 1987, que hizo declarar, en su día, al secretario de Estado de Hacienda, José Borrell, que "existe una gran bolsa de fraude fiscal en el deporte español".

En este universo de 200 personas y entidades están las principales sociedades deportivas del país y los deportistas que, bien por sus declaraciones, bien por las informaciones de los medios de comunicación, se supone que ingresan mayores cifras de dinero. En cuanto a los jugadores extranjeros, las leyes fiscales entienden que todo deportista que trabaje un mínimo de 183 días en España está sujeto a hacer una declaración y su club ha de retenerle un porcentaje próximo al 30% de sus ingresos. Aunque el jugador deje de ser residente en España, el club sigue siendo responsable de la retención, caso de que no la haya efectuado.

'Caso Schuster"

Así, como resultado de este plan, la delegación de Hacienda en Cataluña ha enviado hace unos días a la Fiscalía del Estado un expediente sobre el futbolista alemán occidental Bernd Schuster, del Barcelona, por "posible delito fiscal". Según fuentes de la citada delegación, en la inspección realizada al jugador sobre su declaración correspondiente a 1985 "se ha detectado una desviación en la cuota de la retribución personal superior a cinco millones de pesetas". La delegación ha entendido que existían motivos suficientes para enviar el expediente a la Fiscalía, que es la que ha de determinar si el jugador es inocente de toda culpa, debe ser sancionado o puede ser incluso procesado.

Según informaciones aparecidas en diversos medios de comunicación, el problema en la declaración de Schuster podría estar en que no declaró como salario un pago de 25 millones de pesetas que él entendía que fueron percibidos en concepto de publicidad. Schuster manifestó sobre el caso: "Ese problema no me preocupa. Ya lo hesolucionado". Dirigentes del Real Madrid y del Barcelona han manifestado reiteradamente que sus entidades están sometidas a una continua inspección fiscal desde hace mucho tiempo, pero todo hace indicar que los dos clubes forman parte de la citada lista.

En lo que afecta al baloncesto, la primera noticia de una inspección fiscal se centró en el club CAI Zaragoza, pero, actualmente, el número de clubes inspeccionados se ha visto ampliado al Oximesa de Granada, Leche Rio Breogán de Lugo y Clesa Ferrol. Hacienda no ha hecho discriminación entre nacionales y extranjeros y es consciente de que, aparte de los internacionales, suelen ser los extranjeros, en su inmensa mayoría norteamericanos, quienes más dinero perciben.

Los mismos clubes de Primera División han estudiado en conjunto su situación fiscal -algunos están presentando declaraciones complementarias- y estiman que la deuda global puede superar ampliamente los 500 millones de pesetas.

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