Probable ampliación de la interinidad en el cargo de Defensor del Pueblo

El partido socialista no ha tomado decisiones sobre la persona que deba ser propuesta como Defensor del Pueblo, ni ha sondeado a la oposición acerca de nombres concretos, según afirmaron ayer fuentes parlamentarias. Las complicaciones surgidas a la elección de este cargo hacen prever un aplazamiento de la propuesta, e incluso anoche se apuntaba en el Congreso la posibilidad de que la interinidad se prolongue más allá del mes de febrero, debido a que enero no es hábil a efectos de período de sesiones parlamentarias.Álvaro Gil-Robles, defensor del pueblo en funciones, realizó ayer una visita de cortesía al presidente del Congreso, Félix Pons, que hubo de ser aplazada el pasado 30 de diciembre, cuando el mal tiempo impidió a Pons trasladarse a Madrid desde Palma de Mallorca para dicha gestión.

A la salida de su reunión con el presidente del Congreso, Gil-Robles se mostró cauto respecto a la posibilidad de que sea propuesto como nuevo Defensor del Pueblo. "Todo depende de sus señorías", se limitó a responder, en alusión a los parlamentarios que han de votar este puesto.

AP se declaró ayer a favor de la continuidad del mismo equipo que ha tenido la institución durante la etapa anterior, cuyo titular era Joaquín Ruiz-Giménez, con Álvaro Gil-Robles y Margarita Retuerto como adjuntos. "Si el PSOE cree necesaria alguna modificación, debería explicar cuáles son las razones objetivas que justifican el cambio", comentó Arturo García Tizón, secretario general de AP.

El nombre de Joaquín Ruiz-Giménez parece tener cada vez menos defensores en el PSOE. Al haber cesado por imperativo legal, la interinidad de su segundo en el cargo, Álvaro Gil-Robles, ha colocado como principal sustituto al primer colaborador de Ruiz-Giménez. La defensa que la oposición hace de Ruiz-Giménez tampoco parece favorecer sus posibilidades de cara al partido socialista.

Otras personas mencionadas en los últimos días -Gregorio Peces-Barba, Leopoldo Torres, José María Mohedano- carecen de propuestas en ese sentido y tampoco se sienten inclinados a aceptar el cargo.