El Ejecutivo prepara una reforma para potenciar la presencia de los Gobiernos autónomos en el Senado

La reforma del Senado está siendo objeto de estudio en secreto por parte del Gobierno y del Grupo Parlamentario Socialista del Senado, así como por un grupo de profesores constitucionalistas cuyas, primeras impresiones serán hechas públicas a finales de este mes. La reforma del reglamento de la Cámara alta se puede considerar un hecho, y el objetivo fundamental es crear las condiciones para que los Gobiernos de las comunidades autónomas tengan una representación permanente en el Senado y confieran a esa Cámara el carácter de lugar de debate y solución para los conflictos entre el Gobierno central y las diferentes Administraciones autonómicas, según informaron fuentes socialistas.

El presidente del Gobierno, Felipe González, avaló expresamente la modificación del funcionamiento del Senado el pasado mes de noviembre en el debate sobre el Estado de las autonomías.De esas discusiones salió una moción según la cual la Comisión de Autonomías del Senado estudiaría la modificación del reglamento para dotar a esa Cámara de una de las funciones que la Constitución le marca, cual es la de representación territorial.

Aunque ésa es la parte formal, lo cierto es que el Gobierno y el Grupo Socialista del Senado -formalmente es el grupo parlamentario el que tiene que proponer la reforma- estudian desde hace varios meses las modificaciones oportunas, según reconoció un dirigente socialista.

Este portavoz aseguró que actualmente trabajan "dos equipos" en la modificación del reglamento. "Uno entendiendo el reglamento como instrumento regulador del trabajo cotidiano del Senado", dijo este dirigente socialista, que recordó cómo en la Cámara alta no existe una figura como la resolución, utilizada con frecuencia en el Congreso.

El segundo equipo trabaja estrictamente en las vías que se pueden abrir para que ésta sea una Cámara territorial, lo que lleva aparejado que las comunidades autónomas tengan una presencia real y eficaz, "dentro siempre del marco constitucional", precisó esta fuente.

"Una propuesta coherente"

Los socialistas tienen especial interés en formular "una propuesta coherente", en oposición a otros grupos que, a su juicio, sólo ofrecen medidas parciales.

Antes que los senadores, los diputados del Grupo Mixto Juan María Bandrés, de Euskadiko Ezkerra, y José Manuel Paredes, secretario de la Mesa del Congreso que abandonó recientemente el Partido Liberal, han elaborado conjuntamente una proposición no de ley para que los presidentes de las comunidades autónomas "tengan derecho a escaño en el Senado de la nación".

Además de estos aspectos formales, se expresa en la proposición la posibilidad de que los jefes de Gobierno de las comunidades que no sean miembros del Senado "puedan participar en los debates, tanto en pleno como en las comisiones, con voz, pero sin voto".

Algunas de estas sugerencias están en la mente de los socialistas, además de la potenciación de la Comisión de Autonomías, para lo que no es necesario la modificación del reglamento.

El primer gesto tendrá lugar en febrero, cuando sean llamados a la misma los consejeros de Economía de las 17 comunidades para que expongan sus criterios sobre la ley del Fondo de Compensación Interterritorial, cuya vigencia termina en 1988.

Hasta ahora los grupos de la oposición han culpado al Gobierno de falta de interés en dar más protagonismo al Senado. El presidente del Grupo Popular en esa Cámara, Alberto Ruiz Gallardón, ha señalado que los socialistas no han hecho del Senado "lo que quisieron los constituyentes".