Incertidumbre sobre el futuro de la pareja Casal-Sánchez

La pareja formada por Emilio Sánchez Vicario y Sergio Casal, que ha ganado el Grand Prix de dobles de los dos últimos años, podría deshacerse en los próximos meses. William Pato Álvarez, el entrenador de ambos, declaró ayer que la hipótesis es factible: "La pareja funciona mal. Está a punto de ganar los grandes torneos, pero los pierde por errores propios". Álvarez afirmó que existen presiones de la federación para que no se rompa el dúo: "Quieren que sigan juntos porque tienen posibilidades de ganar una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Seúl".Los jugadores no se mostraron tan radicales como su entrenador. Emilio dijo: "No creo que variemos, porque es dificil encontrar a alguien con quien te puedas compenetrar bien". Sergio Casal fue más lacónico: "Yo no se nada. Este tema se está sobredimensionando en la Prensa".

Pato Álvarez, una persona muy locuaz, reconoció que Anders Jarryd (Suecia), uno de los mejores doblistas del mundo, se había ofrecido para jugar con Emilio. Jarryd, ganador en 1987 de Roland Garros y del Open de

Estados Unidos en dobles, se ha quedado soltero al anunciar su pareja habitual, Stefan Edberg (Suecia), que se centraría únicamente en los individuales en 1988. "Jarryd es muy habilidoso en la red", dijo Álvarez, "y se entendería muy bien con Emilio". k Sin embargo, Álvarez matizó d que la decisión aún no estaba tomada: "Hemos de planificar la temporada, y tenemos 15 días para hacerlo. Si hemos de cambiar, debemos hacerlo inmediatamente. Pero si Emilio y Sergio quieren seguir juntos, yo no me voy a oponer. Son ellos quienes deben decidir".

Álvarez añadió que la solución podría ser mixta. Es decir, que Emilio y Sergio jugasen Juntos en la mayoría de los torneos, pero que en los grandes compromisos, Sánchez Vicario podría 4 unirse a Anders Jarryd.

Emilio Sánchez Vicario reconoció que la separación se había estudiado: "A lo mejor hemos llegado al máximo, y ya no podemos pasar de ahí. No ha habido contactos serios con nadie, pero creo que el hecho de que se haya hablado de nuestra separación quizás nos haya servido como estimulante. Realmente, el año ha sido buenísimo, mejor que 1986. 1 Y si seguimos logrando mejores resultados, creo que debemos continuar juntos".

Sergio y Emilio han ganado seis torneos en 1987 -Filadelfia, Kitzbuehel, Niza, Itaparica, Burdeos y Bolonia-, y han llegado a cinco finales -Winibledon, Memphis, Milán, Múnich y Madrid- Además, se clasificaron para las semifinales del Open de Estados Unidos y del Masters de dobles. Sergio, con Tomás Carbonell, ganó en Sao Paulo y fue finalista en Buenos Aires, y Emilio, con su hermano Javier, llegó a la final de Bastad.

Casal se distancia

Casal ve la situación con cierto distanciamiento. Él es el centro de las críticas de Álvarez, quien considera que Emilio podría jugar mejor con otro compañero. Pero Casal resta importancia al tema: "Emilio y yo nos compenetramos muy bien. Nos conocemos tanto que muchas veces ganamos porque estamos habituados a ello, no porque hayamos jugado bien. Es muy dificil encontrar a alguien que tenga tu misma programación de torneos. Como también es complicado soportar el carácter de tu compañero. Emilio aguanta mis días malos como yo hago con los suyos".Manuel Orantes, el capitán del equipo español de Copa Davis, se mostró contrario a romper la pareja: "En mi vida he visto que se rompa algo que funciona bien. Sería una tontería, porque no son grandes especialistas y tienen una forma muy especial de jugar. Para mi, es mejor doblista Sergio, y Emilio ha conseguido un excelente rendimiento en dobles que sería dificil repetir con otro jugador".

Emilio y Sergio van a iniciar la próxima semana la preparación para 1989. En esta ocasión, el grupo de Álvarez se ha ampliado, ya que a estos dos jugadores se añaden Javier Sánchez Vicario, Tomás Carbonell y, por vez primera, el argentino Martín Jaite. Este año han contratado al entrenador sueco Lennart Blomqvist, que fue el preparador físico de Kent Carlsson, la bestia negra de Emilio Sánchez Vicario en los últimos meses.