Zubizarreta: "Se están sacando las cosas de quicio'

Andoni Zubizarreta, el portero del Barça y de la selección española, sabe que todos los periodistas le esperan a la salida de la puerta de los vestuarios para machacarle a preguntas. En la Prensa, como entre los aficionados, hay quien ha puesto en duda su condición de número uno. Pero él no se esconde, sale por la puerta principal y responde: "Se están sacando las cosas de quicio".Zubizarreta reconoce que el sábado falló en el primer gol de la Real y que quizá lleva encajado algún que otro tanto por "ser demasiado limpio", pero ha llegado a la conclusión de que "no soy tan malo como he oído por ahí". 'Ha Negado un momento en que parece que por ser portero del Barcelona no te pueden meter un gol", precisa, "y, eso, para mí, es bueno, en parte, porque quiere decir que mejoras y que la gente te exige que lo pares todo. Y a veces fallas".

"¿En tu carrera deportiva, alguna vez habías recibido tantas críticas como ahora?", es la primera pregunta que se le formula a Zubizarreta a la salida de los vestuarios. "Sí", responde, "y más también". "Fue", recuerda, "en mis cuatro o cinco primeros meses en el Athlétic" cuando el recuerdo de El Chopo Iríbar podía con todos sus candidatos a sucederle. Entonces, en la temporada 1981-1982,

Javier Clemente, lo prefirió a otros como Andoni Cedrún, lo mantuvo como titular, a pesar de sus lapsus y fallos ingenuos, propios de la inmadurez -tenía 19 años-, y lo convirtió en internacional. "Superé aquella situación a base de trabajo", explica ahora, "y porque Clemente confió en mí".

"Sucede, simplemente, que se están sacando las cosas de quicio", razona, "porque cuando a un equipo le meten muchos goles en un partido será, digo yo, porque han fallado muchos y no sólo el portero. Lo que pasa es que lo más fácil es meterse con el portero y exigirle que pare hasta lo imparable".