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Acuerdo para cambiar el reglamento del Senado y adaptarlo a Cámara territorial

Anabel Díez

El Grupo Socialista se ha comprometido a estudiar la modificación del reglamento de la Cámara alta con el fin de adaptarlo, si hubiera lugar, a la condición de Cámara de representación territorial, según se aprobó ayer en el Senado, en el segundo día del debate sobre el estado de las autonomías, en el que se discutieron las diferentes mociones de los grupos. El PSOE sólo aceptó las de CiU y las del PN V, más una propuesta de la Agrupación Independiente Canaria, además de las suyas.

Los socialistas propusieron para las comunidades que accedieron al autogobierno por el artículo 143 de la Constitución, o vía lenta, la utilización del artículo 150 de la Constitución para alcanzar mayores cotas de autogobierno, lo que significa que será el Gobierno quien marque el ritmo de la autonomía y no las asambleas de cada comunidad.El portavoz del Grupo Socialista, José Constantino Nalda, reconoció ayer que los socialistas planteaban el alza de los techos autonómicos "con cautelas". Fuentes cercanas al ministro de Administración Territorial, Joaquín Almunia, afirmaron que esta propuesta del Gobierno suponía un cierto avance respecto a lo que se había dicho en declaraciones anteriores, según las cuales los plazos para que estas comunidades pudieran ensanchar sus competencias serían muy largos. "No obstante, esto es una propuesta de futuro y nos preocupa que pueda pensarse que el proceso puede empezar mañana mismo", dijo un colaborador de Almunia.

A este respecto, no cabe sino señalar el contenido de la resolución socialista: "Ni la configuración de cada comunidad, ni el ritmo de asunción de competencias tienen que ser necesariamente uniformes, sino adaptados a las características específicas de cada uno. Para ello, resulta conveniente garantizar el equilibrio entre las aspiraciones de las comunidades autónomas y la deseable funcionalidad en la articulación del conjunto de las administraciones públicas". Los socialistas se inclinan para llegar a esta ampliación de competencias por el artículo 150.2 de la Constitución, lo que significa que será el Estado quien tenga la facultad de transferir o delegar competencias a las comunidades autónomas mediante ley orgánica. AP y CDS pedían la vía del artículo 148.2, según el cual, transcurridos cinco años, y mediante reforma de los estatutos, las comunidades autónomas podrán ampliar sus competencias.Los socialistas aceptaron la propuesta de CiU para estudiar la reforma del reglamento de la Cámara alta, al objeto de atribuir al Senado un papel real de cámara de representación territorial, lo que fue solicitado por todos los grupos, incluido el PSOE.El peso del debate por parte socialista correspondió ayer a José Constantino Nalda, que tuvo que hacer frente, fundamentalmente, a las recias críticas del portavoz de AP, José Miguel Ortí Bordás, y de Antonio Romero, portavoz de Izquierda Unida. Ortí Bordás resaltó con entusiasmo las profundas convicciones autonomistas de AP, al tiempo que rechazaba cualquier "tentación federalista". Nalda le sugirió que revisara el diario de sesiones para comprobar "qué cosas decían en AP cuando se discutieron los estatutos de Cataluña y País Vasco". Al igual que Ortí Bordás, fracasaron en su intento de introducir mociones el representante del CDS, Alberto Dorrego, así como Juan José Pujana, de Eusko Alkartasuna; Jaime Ignacio del Burgo, del PDP; Emilio Eiroa, del Partido Aragonés Regionalista, y Antonio Romero, de Izquierda Unida.

El abrazo nacionalista

El PSOE optó ayer, como en otras ocasiones, por buscar el consenso con los nacionalistas y alejarse de las posiciones de AP y del CDS, de los que no aceptó sugerencia alguna en el último tramo del debate sobre el estado de las autonomías, en el que se discutieron las mociones de cada grupo. Finalmente se aceptaron, además de las mociones socialistas, las de Convergencia i Unió, defendidas por Ramón Trias Fargas; del Partido Nacionalista Vasco (PNV), en voz de Carmelo Renobales, y una del senador Isidoro Sánchez, de la Agrupación Independiente Canaria, según la cual se acepta la modificación del actual régimen económico fiscal de las islas.El PNV vio prosperar su deseo de intensificar los convenios bilaterales suscritos entre la Administración central y las comunidades autónomas, así como la aceleración del programa de transferencias pendientes para el País Vasco, aunque los socialistas eliminaron cualquier referencia a un calendario. Convergencia i Unió sintonizó con los socialistas al pedir el estudio de la modificación del reglamento de la Cámara con el fin de adaptar el Senado a la condición de Cámara de representación territorial. Convergencia insta a que la Comisión de Autonomías continúe sus trabajos con especial atención a las competencias que resulten afectadas por el ingreso de España en la CE.Las mociones del PSOE, además de la referida a la elevación en el futuro de los techos competenciales y la revisión del papel del Senado, defendida por el socialista catalán Joan Raventós, son de matiz claramente teórico y muy pegadas a la reflexión política.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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