Protestas vecinales tras el incendio de un taller en León

El incendio de un taller de serigrafía en León a última hora del lunes, en el murieron dos personas y resultaron heridas de escasa gravedad otras seis, ha provocado la protesta de los vecinos de las viviendas situadas cerca del local siniestrado, por ubicarse en la zona un taller de estas características.Algunos vecinos del local han denunciado que el trabajo del taller se sucedía hasta avanzadas horas de la madrugada y "los ruidos eran insoportables". El taller contaba con licencia municipal de apertura desde noviembre de 1981 y en él se almacenaban gran cantidad de disolventes, pinturas, mecheros y varias botellas de camping-gas.

Según la declaración de los heridos, el siniestro se produjo, al parecer, cuando uno de los fallecidos, el jefe del taller, Francisco Magdaleno del Pozo, manipulaba con un soplete un encendedor de bolsillo para grabar en él una marca comercial. Francisco Magdaleno y el empleado José Luis Rodríguez Arias fueron rescatados aún con vida por miembros de la Policía Municipal y bomberos y fallecieron tras ser ingresados en el hospital Princesa Sofía.

Los heridos, entre ellos la esposa de Francisco Magdaleno, lograron salir por la puerta del establecimiento y una pequeña ventana de la parte trasera, de aproximadamente un metro de diámetro. Algunos de ellos fueron atendidos en la residencia sanitaria Virgen Blanca.