La federacion impidió que Muñoz alinease a Gordillo, pese a tener el alta médica

La Federación Española de Fútbol impidió que Gordifio, jugador del Real Madrid, pudiera ser alineado por el seleccionador, Miguel Muñoz, frente a Albania. Gordifio, que regresó el martes por la noche a Sevilla, recibió en la mañana de ayer el alta de Miguel Ángel Herrador, médico del Madrid, y de Teodoro Delgado, del equipo nacional. Pero Muñoz, que en la víspera comentó su interés por contar con él, manifestó ayer que Gordillo no le daba "suficientes garantías para aguantar todo el partido". El centrocampista señaló ayer al periodista José María García como la persona que puso en marcha su retorno a Sevilla.

A media mañana de ayer se reunieron en una habitación del hotel de la concentración Miguel Muñoz, Teodoro Delgado, Miguel Ángel Herrador y. Rafael Gordillo. Tras algo más de una hora, Muñoz y los dos médicos bajaron a un salón. El seleccionador manifestó: "No va a jugar; tiene el alta, pero no sé si va a aguantar todo el partido. La decisión ha sido mía". Por su parte, Herrador, médico del Madrid, que llegó a primera hora a Sevilla, dijo: "Le he dado el alta médica. Clínicamente, está en condiciones de jugar. La decisión corresponde al seleccionador. Desde luego, si juega, la responsabilidad es de la federación, ya que el Madrid le ha dado el alta". Delgado, evasivo, declaró: "Nunca, en 200 partidos que llevo, ha pasado una cosa igual. ¿Que quién ha mandado que venga Gordillo? No lo sé. Clínicamente, está en condiciones. Pero no hay garantías de que aguante todo el partido". La federación ha mantenido desde que comenzó el caso Gordillo una misma postura: considerar que las condiciones del jugador no eran las idóneas para que jugase y desde el primer momento optó por no arriesgarse a que durante el encuentro sufriese una lesión o recayese en la que tenía, tratando de evitar así que hubiera problemas a la hora de acudir al seguro suscrito para los jugadores. Incluso en la tarde del martes, cuando todos afirmaban que Gordillo llegaría a Sevilla en el avión de la noche, Agustín Domínguez, secretario general de la federación, se mantenía en que Gordillo no regresaría.

Gordillo fue el último en bajar, después de la reunión con los médicos y Muñoz. Visiblemente molesto, comentó todo los sucedido: "Ayer [por el martes] a mediodía recibí una llamada de José María García en mi domicilio y me dejó recado para que llamase a Muñoz al restaurante La Dorada, donde estaba comiendo. Llamé y hablé con Muñoz. Me estuvieron llamando toda la tarde y tan pronto me decían que fuera a Sevilla como que me quedase Domínguez me dijo que no viniera. Al final, volvieron a llamar García y Ramón Mendoza, el presidente del Madrid, y me dijeron que viniera a Sevilla, que todo estaba solucionado". Cuando llegué, vi que todos me esperaban bien, pero nadie se mojaba ni me decía si iba a jugar o no".

Reunión de jugadores

Gordillo se reunió con los juga- dores en la noche del martes, nada más llegar al hotel. "Les expliqué lo que había pasado. Entonces pidieron que viniera Muñoz y le preguntaron qué pasaba. Muñoz me dijo entonces que no iba a jugar y los jugadores se enfadaron y le acusaron de haber sido manipulado y de no haber sido capaz de mojarse", expuso. Gordillo afirmó que todo -había sido "lamentable" y agregó: "No comprendo cómo Muñoz, si tenía decidido que no iba a jugar, me hace venir y no me lo dice antes. Así, me habría quedado en casa". Gordillo aseguró que, tras la reunión de la noche, decidió regresar a Madrid, pero que sus compañeros le pidieron que se quedase. "Estoy dolido por todo. Me hubiera marchado si no es porque me pidieron que me quedase. Me encuentro desplazado y mal".

Según el jugador, la reunión de la mañana con los médicos había sido un simple trámite y se expresó como si todo estuviera decidido antes de la misma. Ante la pregunta de los informadores de si lo que se intentó en esa reunión no era otra cosa que coordinar las declaraciones posteriores de las distintas partes, el jugador asintió. Gordillo aseguró también que los contactos entre García, Muñoz, el Madrid y la federación no los conocía y que prefería mantenerse al margen.

Preguntado por el culpable de todo lo ocurrido, Gordillo aseguró: "El culpable es el seleccionador porque era quien tenía que decidir. Ahora bien, no sé qué circunstancias le han rodeado".

La versión de García

José María García, sobre el asunto, apuntó: "El lunes hablé con Muñoz. Me dijó que era una pena que no pudiera contar con Gordillo. Le mostré mi sorpresa porque el jugador se estaba entrenando normalmente con su equipo. Lo que yo procuré entonces fue hacerle un favor porque el problema era de falta de entendimiento, un problema que la federación no había sido capaz de arreglar. Llamé al jugador y le dije que se pusiera en contacto con el seleccionador. Luego, lo que hice directamente con Gordillo fue arreglarle por medio de un empleado en Barajas que pudiera llegar a Sevilla, ya que no tenía plaza ni llegaba a tiempo para coger el avión".