Los especialistas pronostican tablas pese a la ventaja con que acabó ayer la novena partida Anatoli Karpov

La novena partida del Campeonato Mundial de Ajedrez que disputan los soviéticos Gari Kasparov, actual campeón, y el aspirante, Anatoli Karpov, quedó aplazada ayer con mínina ventaja de éste, que juega con blancas. Sin embargo, la opinión mayoritaria de los especialistas pronostica tablas para hoy. El marcador señala un empate a cuatro puntos, en un encuentro cuyo límite es de 24 partidas.

Tras jugar nuevamente la defensa Grunfeld, Kasparov pecó de optimista y estuvo cerca de la derrota, pero después se defendió bien hasta que se cumplió la quinta hora de juego.Un detenido estudio de la carrera de Karpov permite comprobar que el ex campeón pone un especial interés en ganar las partidas inmediatamente siguientes a las que pierde. Así lo hizo en la presenta edición del campeonato, cuando se impuso en la quinta tras perder la cuarta. Un claro síntoma de la predisposición que Karpov tenía ayer para luchar por el triunfo fue su llegada al escenario antes de que el reloj se pusiera en marcha.

Quienes más agradecieron esta puntualidad fueron los informadores gráficos, que por fin pudieron aprovechar totalmente los tres minutos que el árbitro les concede sin pasarse ni un segundo. Con el supuesto fin de crear un estado de tensión, Kasparov retrasó un poco sus dos primeras jugadas para acabar planteando la ya popular defensa Grunfeld, por decimocuarta vez contra Karpov. Éste no parecía tener ninguna duda al respecto y se entretuvo observando al público durante esos dos intervalos.

Después, todo fue muy rápido hasta la jugada 14, cuando Kasparov cambió el rumbo de la partida con respecto a la quinta y séptima de esta confrontación. La posición resultante era de marcado corte estratégico, muy distante de las complicaciones tácticas habidas en esas dos ocasiones. Consecuentemente, la mayoría de los especialistas daban ventaja a Karpov, sobre todo porque su estilo de juego resulta más adecuado para este tipo de situaciones.

El punto crucial de la partida fue la jugada 21 de Kasparov, que implicaba un peligro enorme. El campeón se dejó llevar nuevamente por su natural agresividad y prefirió luchar por la iniciativa que jugar para tablas. El amor por el riesgo de Kasparov provocó el apasionamiento de los espectadores, que ayer volvieron a llenar el teatro Lope de Vega y las instalaciones anexas, mientras el juego se acercaba a la fatídica quinta hora, donde se deciden la mayoría de las partidas.

Desarrollo

Blancas: Karpov. Negras: Kasparov. Defensa Grunfeld.1 d4, Cf6 2 c4, g6 / 3 Cc3, d5 /4 cd, Cd5 /5 e4, Cc3 / 6 bc, Ag7 / 7 Ac4, c5 / 8 Ce2, Cc6 / 9 Ae3, 0-0 / Ag4 / 11 f3, Ca5 / 12 Af7, Tf7 / 13 fg, Tf1 / 14 Rf1, cd (en las partidas quinta y séptima de este encuentro, Kasparov jugó 14... Dd6 / 15 e5, Dd5, en ambos casos, las negras lograron un juego activo a cambio del peón sacrificado, pero las posiciones eran poco claras) /15 cd, Db6 (una nueva idea con respecto a la práctica magistral; en las pocas partidas que se conocen con esta posición se jugó 15... Dd6 ó 15... Dd7) / 16 Rgl, De6 / 17 Dd3, Dg4 (este plan es muy distinto a los conocidos; las negras se limitan a recuperar el peón mientras las blancas consolidan su posición) / 18 Tf1, Tc8 (en principio, el negro debe conservar la torre para tener contrajuego en el flanco de dama)/ 19 h3, Dd7/ 20 d5, Cc4 / 21 Ad4, e5 (una decisión muy dudosa. Parece mucho más adecuado 21... Ce5) 22 de6 a. p., De6 / 23 Ag7, Rg7 / 24 Cf4, Dd6 / 25 Dc3, Rh6 / 26 Cd5, De5 / 27 Dd3 (el gran maestro Eduard Gufeld propuso aquí 27 Db4 como mejor ju gada) 27... Rg7 / 28 Cf6, Dd6 / 29 Dc3, De5 / 30 Dd3, Dd6 / 31 Dc3, De5 (Karpov repite jugadas mientras decide el plan a seguir)/ 32 Db3, Tc7 / (probablemente, la única jugada que evita una derrota inmediata)/ 33 Dd3, Tf7 / 34 Dc4, Tf6 (Kasparov se ha defendido bien, forzando un cambio de piezas que mejora notablemente sus posibilidades defensivas)/ 35 Td1, b5 / 36 Td7, Rb6 / 37 De2, Dc5 / 38 Rh2, De5 /39 Dc3 / 40 Rg2, De4 / 41 De3, g5 / 42 Td2, Df1 / 43 Rh2, y Kasparov realizó la jugada secreta.