La Comisión Europea impondrá una reducción a la mitad del actual régímen de distancias de las gasolineras

La Comisión Europea enviará antes de un mes al Gobierno español el avis motivé sobre la adaptación del vigente Monopolio de Petróleos español a la normativa comunitaria y que, a menos que se adopte la improbable decisión de llevar la disputa al Tribunal de La Haya, forzará a España a reducir a la mitad el actual régimen de distancias. Fuentes solventes aseguran que el Ministerio de Industria y Energía ha comprometido la reducción del régimen de distancias a cambio de preservar su régimen concesional.

Por otro lado, el Gobierno ha prometido a la CE iniciar la liberalización parcial del sistema de precios de productos petrolíferos antes de año y medio, sin esperar a final del período de transición en 1992. Los productos que probablemente se liberalizarán primero serán los carburantes distribuidos al por menor en las estaciones de servicio.La reducción del régimen de distancias en el establecimiento de gasolineras en España se ha convertido en el único punto conflictivo en la recta final de conversaciones que el ministerio mantenía con el comisario de asuntos para la competencia, Peter Sutherland. En la última comunicación de Sutherland la CE emplazaba a España, entre otras cosas, a permitir el libre y total acceso de las multinacionales a la venta al por menor de productos petrolíferos (vía estaciones de servicio), regulado por medio del sistema concesional por el que el antiguo Monopolio de Petróleos permitía la apertura de gasolineras.

Zonas geográficas

A pesar de que la respuesta del ministro de Industria, Luis Carlos Croissier, era clara al respecto, rechazando el pasado 28 de septiembre cualquier posibilidad de cambio en el régimen de distancias, fuentes comunitarias y españolas han señalado que se ha llegado a un compromiso por el que España mantendrá el actual régimen concesional de las gasolineras ya instaladas a cambio de una reducción a la mitad del número de kilómetros en que puede libremente construirse una nueva estación de servicio. También se ha pactado la distribución geográfica en la instalación de nuevas gasolineras, reduciendo de tres a dos el número de zonas geográficas donde forzosamente tienen que estar presentes las multinacionales.

La modificación de la postura española se debe a que hubiera sido prácticamente imposible a las multinacionales construir nuevas gasolineras en algunas provincias sin la prevista reducción de las distancias. Para la CE, esto hubiera sido suficiente para llevar la discusión jurídica al tribunal comunitario de la competencia sin muchas garantías de éxito.

Otros temas ya pactados en la negociación con la comisión es el de los cupos de importación. La carta de Croissier se comprometía a reducir a cero, antes de 1989, los contingentes de importación cedidos a los operadores al por mayor que fueran refinerías españolas, y que este año totalizan el 40% del total. Sin embargo, la CE ha permitido que las refinerías españolas utilicen filiales suyas para obtener cupos de importación en el período transitorio.