Gómez-Navarro estudia prohibir el trasvase de recursos de los clubes de fútbol al baloncesto

El presidente del Consejo Superior de Deportes, Javier Gómez-Navarro, estudia las fórmulas jurídicas adecuadas para tratar de prohibir el trasvase de recursos de los clubes de fútbol a los equipos de baloncesto. En su opinión, "el Real Madrid y el Barcelona están desequilibrando económicamente el deporte de la canasta, al destinarle dinero procedente del fútbol y en cantidades muy importantes, elevando el nivel de retribuciones por encima de lo que el baloncesto da de sí. Si otros clubes siguen esa tónica, sin contar con el soporte del fútbol, se puede generar una grave crisis".

Gómez-Navarro no oculta su preocupación por el rumbo que está tomando el baloncesto: "Es un deporte que tiene ya muchos problemas, pero todavía no está en situación de llegar a la crisis del fútbol. El más grave es que dos clubes, el Real Madrid y el Barcelona, están transfiriendo unos recursos muy importantes del mundo del fútbol al del baloncesto y están desequilibrando el deporte de la canasta. Y no se puede gastar en ningún deporte más dinero del que se ingresa".Para el secretario de Estado para el Deporte, "el baloncesto tiene una capacidad de generar ingresos que es la que es por ahora, aunque a lo mejor dentro de cinco o diez años aumenta. ¿Qué sucede? Que el Madrid y el Barcelona están destinando dinero que no se genera del baloncesto y levantando el nivel de retribuciones a los jugadores por encima de lo que el baloncesto da de sí. Si los demás clubes hacen lo mismo, pero sin ese soporte económico que el fútbol proporciona al Madrid y el Barcelona, se puede llegar a la crisis definitiva". "Yo espero, sin embargo, que los clubes sean sensatos y no hagan eso. Pero, en cualquier caso, habría que prever. No estoy diciendo que vayamos a hacerlo a corto plazo, pero habrá que estudiar la prohibición de ese trasvase de recursos de un deporte a otro que puede llegar a hacer que se generen situaciones insostenibles. Hay fórmulas jurídicas para ello. En Italia, por ejemplo, está reglamentado que los clubes de fútbol no pueden tener secciones de baloncesto", añade.

El Real Madrid y el Barcelona destinan aproximadamente 250 millones de pesetas cada uno a sus secciones de baloncesto. El tercer club español en presupuesto, el CAI Zaragoza, apenas supera los 120 millones. Los dos grandes trasladan así su pugna futbolística al mundo de la canasta y tienen, pues, el doble de presupuesto que el tercero en discordia. El Ram Joventut supera muy ligeramente los 100 millones.

Los contratos

El capítulo que origina mayores índices de inflación es el de los contratos de los jugadores, en los que el Real Madrid y el Barcelona fueron ya los primeros en romper el mercado. Hubo un caso curioso: Epi firmó en 1982 un compromiso por 10 años con el Barcelona a cambio de 100 millones; era el techo, pero dos años más tarde se quedó ridículo y Epi ha tenido que renegociarlo. Fernando Martín renegoció el suyo con el Real Madrid y pasó a cobrar en tomo a los 22 millones anuales, pero ahora, tras su regreso de la NBA, intenta recibir más de 50 millones. Andrés Jiménez dejó hace dos años el Joventut para irse al Barcelona con una ficha de 35 millones.A la vista de estos contratos, otros clubes han tenido que aumentar los emolumentos de sus figuras para que éstas no se fueran al Real Madrid o el Barcelona y, además, inventarse una lista de siete intransferibles, ya que está claro que el Joventut nunca podrá pagar a Jordi Villacampa lo que el Real Madrid o el Barcelona pueden ofrecerle.

Una medida paralela a la lista de intransferibles es la de obligar a un límite salarial, establecido en 150 millones, que se supone que es lo máximo que se puede gastar un equipo en salarios y primas. Pero hay serías dudas ya de que ese límite no haya sido rebasado por alguno de los dos grandes. La gestión económica de los dirigentes del baloncesto va camino de igualar a los del fútbol y, en medio de esa tensión, se producen situaciones tan pintorescas como continuos cambios de extranjeros durante la temporada y destituciones de técnicos tras los primeros tropiezos.

El Real Madrid, mientras tanto, intenta rentabilizar algo su sección de baloncesto y para ello ya ha trasladado sus partidos al Palacio de los Deportes, con lo que triplica la venta de localidades, aparte de brindar la camiseta a una firma publicitaria, Parmalat, en un paquete con el fútbol. Por contra, el Barcelona mantiene para la publicidad en el baloncesto el mismo criterio en contra, por razones de simbología, que para la del fútbol, aunque hace unos meses se habló de un posible patrocinador específico, Sharp, para el conjunto del aro.