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Nueva Zelanda y Australia rechazan los resultados del referéndum sobre la independencia de Nueva Caledonia

Lluís Bassets

Los resultados del referéndum sobre la independencia de Nueva Caledonia fueron rechazados ayer categóricamente por los Gobiernos de Nueva Zelanda y de Australia, los dos vecinos de mayor peso específico en la región, y por el grupo de paídes melanesios, dentro del Foro de Pacífico, formado por Papusia-Nueva Guinea, Vanuati e Islas Salomón, que comparten con la población indígena del archipiélago francés los mismos orígenes étnicos y culturales.

El Gobierno conservador francés y la población caledoniana implantada en las islas desde la colonzación expresaban ayer su entusiasmo por la participación en el referéndum, cifrada en los últimos recuentos en un 59,1 %, y por la adhesión abrumadora de un 98,3% de los votantes a Francia.El primer ministro francés, Jaeques Chirac, viajará el jueves a Noumea para recoger personalmente los frutos políticos de su éxito entre la población profrancesa y previsiblemente para esbozar el marco jurídico de integración del territorio en Francia, que puede ser un nuevo estatuto de autonomía. El presidente del Gobierno provisional de Kanaky y de la coalición de partidos independentistas que han boicoteado la consulta, Jean-Marie Tjibou, tras rechazar el resultado del referendum, aseguró que si Chirac llega a Notimea "con un estatuto de autonomía que continúa negando al pueblo canaco, puede regresar inmediatamente".

Tjibaou aseguró ayer en una conferencia de prensa que el problema caledoniano "no ha cambiado ni una pulgada" después de la consulta y exigió un auténtico referéndum de autodeterminación. El presidente canaco consideró encomiable que los franceses que viven en Nueva Caledonia hayan votado para seguir siendo franceses y subrayó que el 80% de quienes han votado en favor de mantenerse dentro de la República francesa son inmigrantes "no canacos que deciden sobre el destino de todos y también de los canacos".

Según el Frente de Liberación Nacional Kariaky Socialista (FLNKS), sólo el 16,8% de los melanesios han votado por Francia, mientras que el 83,2% restante se han abstenido o han votado por la independencia.

El análisis de la participación electoral seguirá siendo objeto de polémicas. Mientras en la concentración urbana de Noumea, que agrupa a más de un tercio del censo, la participación ha sido del 81%, en el resto del archipiélago ha alcanzado sólo el 35%. Una fuente autorizada del FLNKS aseguró que el número de votos por delegación entre los melanesios era sospechosamente elevado. En las islas de Rifou y Maré, por ejemplo, 1.135 votos sobre 1.71,9 y 222 sobre 607, respectivamente, fueron depositados por delegación, siempre según la misma fuente. La legislación francesa permite que una persona deposite hasta cinco votos por delegación de votantes ausentes por motivos justificados. Pero el FLNKS ha insinuado que los leales a Francia han comprado votos por delegación.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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