González y Goria, de acuerdo en las refonnas necesarias para la construcción política de la CE
El primer ministro italiano, Giovanni Goria, y el presidente del Gobierno español, Felipe González, mostraron ayer la convergencia de posiciones de los dos países para la "construcción política europea" donde son necesarias reformas estructurales que corrijan los actuales desequilibrios entre los países del norte y del sur de la CE
.González y Goria analizaron también el buen momento de las relaciones bilaterales, presididas por la ausencia de contenciosos y el fuerte dinamismo de los intercambios económicos, especialmente por parte italiana.Goria, de 44 años, el primer ministro más joven de la CE -puesto en el que ha desplazado a Felipe González-, se entrevistó durante dos horas con el jefe del Ejecutivo español y posteriormente acudió al palacio de la Zarzuela, donde fue invitado a una cena por los Reyes, junto a Felipe González y los ministros de Exteriores. Después de la cena, Goria regresó a Roma.
El primer ministro italiano llegó a Madrid a las cinco de la tarde, y antes de acudir a la Moncloa, recibió al dirigente democristiano Javier Rupérez, en especial deferencia partidista.
La breve visita de trabajo a Madrid de Giovanni Goria forma parte de la gira que proyecta realizar por todas las capitales de la CE para darse a conocer e intercambiar puntos de vista con sus homólogos europeos. Giovanni Goria, primer mandatario italiano desde el pasado 29 de julio, fue ministro del Tesoro en los últimos años, con el Gobierno del pentapartito de Bettino Craxi, viaja acompañado del titular de Asuntos Exteriores, el democristiano Giulio Andreotti, que fue jefe del Gobierno y ministro en varias ocasiones durante su dilatada vida política. Ayer, antes de viajar a Madrid, la delegación italiana había iniciado su periplo europeo en La Haya.
González y Goria hablaron a solas durante casi una hora y posteriormente siguieron conversando en presencia de los ministros de Exteriores, los embajadores de los dos países y los asesores de temas internacionales. A la salida, pasadas las 9.25 horas, con un pequeño retraso para acudir a la cena de la Zarzuela, los dos jefes de Gobierno hicieron unas breves declaraciones en las que mostraron las afinidades en relación con los problemas de, Europa y la "construcción política de la CE".
Felipe González dijo que España no va a enviar fuerzas navales al Golfo Pérsico, como han hecho otros países europeos. Y a la pregunta de si con el democristiano Goria mantendría la identidad de puntos de vista que existió con el anterior Gobierno del socialista Bettino Craxi, González rechazó distinciones partidistas y añadió que, pese a la posible existencia de matices en temas como la construcción europea, "son los países, y no los partidos, los que han adoptado esas decisiones".
