Desde el estupor
Escribo estas líneas desde el estupor que me ha causado el reportaje sobre el seminario Arquitecturas del cine de la UIMP en EL PAÍS del jueves 20 de agosto, ya que no refleja en absoluto lo que allí ha tenido lugar. En efecto, acabamos de sufrir dicho seminario y es mi propósito relatar aquí el desarrollo del mismo para dejar constancia de lo que sin duda califico de fraude docente, por el bajísimo nivel en el contenido de las exposiciones que, con muy pocas excepciones, han coincidido en la inadecuación con el título del seminario. Nos han contado un libro, nos han explicado un tema que más correspondería a una clase de urbanismo en una escuela de arquitectura, nos han contado su vida, y no en sentido figurado, nos han leído completos los programas de las asignaturas de la Escuela de Cinematografía, nos han bombardeado con diapositivas de un muestrario de mobiliario desde 1900 hasta nuestros días, nos han contado una película que, para colino, no pudimos visionar porque no les había llegado; hasta un cantautor se nos trajo que dijo: "Yo no sé nada de esto de arquitectura del cine". Como remate, hemos tenido que aguantar la grosera manifestación de que el diseño valenciano es "hortera", y que uno de los expertos se compadeciera de los que esperaban oír algo interesante. Todo esto sin citar otros desastres, como la falta total de puntualidad de los conferenciantes, la masificación en la sala y la completa falta de coordinación y dirección del seminario- Profesora de la universidad de
