Las realizaciones rompen los máximos
Las abundantes partidas de papel que han hecho acto de presencia en el patio de operaciones, junto con una inhibición temporal de la demanda, han dado al traste con la racha de subidas, mantenida sin reveses desde que el índice rompiera la frontera del 300%. La tónica del día a día, que no la tendencia genérica del mercado, se ha truncado sin que parezcan existir especiales motivos de preocupación. Incluso los bolsistas añejos han calificado a ésta purga de muy deseable, puesto que se sanean las cotizaciones y se autoconsolida el fondo de los corros.En la sesión bursátil de ayer únicamente los valores químicos, y no todos, han sido capaces de sostener el ritmo de pasadas semanas, mientras el resto de los grupos naufragaban en mayor o menor medida ante el acoso de las retiradas de beneficios. A la vista del aluvión de ofertas, el dinero se ha moderado en su actuación dejando paso libre a un movimiento que puede conseguir en poco tiempo el establecimiento de precios que resulten de nuevo interesantes a los compradores.
Los sectores clásicos han operado entre una auténtica oleada de flexiones bajistas, que no han perdonado ni a Telefónica, pese a que lleva varios días bajando, ni a los grandes bancos, todos ellos con papel por caja, ni a las eléctricas. No obstante, la existencia de un estimable caudal de dinero circulante por los aledaños del mercado hace pensar a los expertos que la dirección de los índices puede volver a girar de inmediato, aunque, seguramente, no hoy mismo. Posiblemente. a los cierres de la última jornada hábil de la semana pueden verse ya los primeros síntomas de reacción, y en los primeros compases de la tanda venidera ésta puede haber tomado fuerza. Con todo, este reajuste cambiario no ha dado la impresión en momento alguno de preocupar en exceso a los analistas.
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