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Una sobrecarga eléctrica provoca un incendio en el Clínico de Valencia

Una sobrecarga en el fluido eléctrico, seguida de dos apagones, cuyas causas y origen no han sido del todo esclarecidos, provocó ayer un incendio en un semisótano del hospital Clínico de Valencia, que dejó sin energía los servicios centrales del centro hospitalario y de la contigua facultad de Medicina.

Las unidades de cuidados intensivos y de reanimación, las cocinas, los laboratorios, los rayos X y la farmacia resultaron inutilizados temporalmente. El grupo electrógeno de urgencia tampoco pudo ser utilizado, al resultar averiado como consecuencia del súbito aumento de tensión. No hizo falta evacuar a ninguno de los aproximadamente 550 residentes del centro hospitalario.El incendio se declaró unos 10 minutos después de las nueve de la mañana en un semisótano sobre el cual está situado el Instituto Anatómico Forense. Las llamas fueron rápidamente extinguidas por un equipo de 15 bomberos, asistidos por dos coches cuba y efectivos de la policía local de Valencia.

Al parecer, la causa del siniestro fue una sobrecarga eléctrica, que provocó una explosión en los transformadores que alimentan los servicios centrales, tanto del hospital como de la facultad de Medicina y ardieron dos condensadores.

Los responsables del Clínico daban ayer como seguro que la sobrecarga y el consiguiente incendio fueron producto de que un cable de alta tensión resultara dañado en alguna obra cercana. Sin embargo, un empleado de Hidroeléctrica aseguró que el aumento de tensión procedió de las propias instalaciones hospitalarias. Pompeyo Esparza, director en funciones del Clínico, manifestó a este periódico que, con anterioridad a que se declarase el incendio, se habían producido al menos dos apagones en la zona. Hidroeléctrica no dio ninguna explicación sobre tales incidencias.

Los daños no han sido aún evaluados. El administrador del centro hospitalario, Rafael Ferrer, confiaba en que a lo largo de la tarde de ayer pudieran reanudarse los servicios interrumpidos, merced a la instalación de dos nuevos grupos electrógenos -uno de emergencia y otro portátil-, además de la reparación del averiado, y que, en una semana, las instalaciones dañadas quedarían totalmente reparadas.

Tras el siniestro, que no afectó a la zona donde se alojan los pacientes, las urgencias fueron desviadas a otros centros. El hospital Doctor Peset suministró medicamentos. Los productos que precisaban refrigeración fueron trasladados en su mayor parte al Centro de Transfusiones de la Comunidad Valenciana. Las cocinas y la unidad de cuidados intensivos reanudaron sus servicios poco después del mediodía.

El 2 de agosto del año pasado se registró un importante incendio en el hospital Clínico que arrasó totalmente la planta superior, utilizada como almacén.

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