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EL TOUR

Roche llegó a perder el conocimiento

Luis Gómez

L. G., Stephen Roche llegó a su habitación en ambulancia. Horas después, el jefe de prensa del Tour comunicaba que, después de habérsele aplicado oxigenación, el corredor se había repuesto "del esfuerzo titánico" realizado en la etapa. "Su estado es satisfactorio", terminó. Roche, según los doctores, había sufrido un colapso a causa de un exceso de fatiga. Se especuló con falta de alimentación como causa de su desfallecimiento, dado que atacó aprovechando el control de avituallamieuto. No hizo el calor que tanto temía. Roche llegó a perder o el conocimiento en la meta, pero en el hotel dijo que hoy saldría a ganar el Tour.

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Roche no pudo hacer ninguna declaración en la meta; cayó de la bicicleta nada más cruzar la línea; al lado opuesto de donde estaba Delgado, quien se había recluido en la cuneta, muy fatigado, pero dando más bien la sensación de que trataba de huir del acoso de los fotógrafos. Rodeado de una nube de gente, Roche intentó contestar a algunas de las preguntas que le lanzaban nerviosamente. Se sentó sobre la tribuna instalada para los comentaristas de televisión y se desvaneció. Rápidamente, le llevaron una mascarilla de oxígeno, le arroparon desordenadamente. Roche abría y cerraba los ojos, su mirada iba y venía. Los doctores buscaron suero, mientras la organización trataba de ordenar el trabajo de los informadores gráficos, que tenían ante sí material de primera mano. Unos minutos más tarde lograron arroparle con una manta especial de aluminio. Seguía tumbado en el suelo, pero la organización había conseguido ya que diferentes cadenas de televisión consiguieran turnarse en la filmación del acontecimiento. Pero Roche era ajeno a todo lo que pasaba a su alrededor.Su recuperación de urgencia duró más de media hora, pero el corredor no lo hizo suficientemente. Acudió la ambulancia y lo evacuó de la línea de meta. Media hora después, y en medio de un gran atasco, Roche era transportado a su hotel. Se había desprendido ya de la mascarilla y devoraba una botella de agua. Iba solo.

El irlandés es ahora toda una incógnita. Todo parece indicar que estará en la línea de salida hoy -no es el primer corredor que se recupera eficazmente de un desfallecimiento de este tipo- pero su actuación presenta serias dudas ante su estado físico y, sobre todo, ante la capacidad de recuperación que demuestre ante otra etapa alpina, de 186 kilómetros, con dos puertos de primera, dos de segunda, uno de tercera y un último de categoría especial.

Roche sorprendió a todos atacando a Delgado. Había sido muy duro hace dos días manifestando que atacaría inmediatamente a Bernard, pero ante el liderazgo del español se había mostrado más comedido. Es más, dada la escasa diferencia que les separaba, Roche había manifestado que su interés era el de seguir, en todo momento, la rueda de Delgado.

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