Más de 80 muertos en dos atentados en la ciudad paquistaní de Karachi

Más de 80 personas resultaron muertas ayer en Karachi, y al menos otras 250 heridas, al estallar dos bombas de gran potencia en el centro de la ciudad, la más poblada de Pakistán, situada en el sur del país. La primera bomba, colocada en un coche, estalló poco antes del atardecer en una calle del bazar (zona comercial de la ciudad) por la que en aquel momento transitaba mucha gente. Tras esta explosión se declaró un gran incendio que provocó el pánico entre los presentes.

Pocos minutos después hizo explosión la segunda bomba, que ' al parecer, fue arrojada por un desconocido en un supermercado del bazar. Inmediatamente se incendiaron otros tres inmuebles cercanos.En una declaración en Islamabad (capital del país), el ministro paquistaní de Información, Qazi Abdul Majid Abid, atribuyó la responsabilidad de los atentados a "elementos subversivos", y añadió: "La tragedia ha hundido a todo el país en el dolor. El Gobierno no vacilará en cumplir su deber de perseguir a los criminales".

Decenas de ambulancias acudieron a los lugares en que se produjeron los atentados, mientras los bomberos trataban de apagar los incendios.

Testigos presenciales de los salvajes atentados señalaron que vieron "sangre y trozos de carne esparcidos por los alrededores". "Todo el mundo gritaba", añadieron.

Ninguna organización política se había atribuido esta madrugada la responsabilidad de los dos atentados.

Casi todos los vehículos que se encontraban estacionados junto al bazar Bohri resultaron dañados por el atentado, mientras el barrio en que está situado el mercado aparecía invadido por una espesa nube de humo.

La mayor parte de las víctimas resultaron mutiladas o quemadas en los dos estallidos, que provocaron el caos en en centro de Karachi, según los periodistas que se acercaron a la zona tras las explosiones.

El pasado 5 de julio, durante una manifestación promovida por la oposición, la explosión de tres bombas provocó en Lahore la muerte de siete personas.