FECSA prepara una nueva ampliación de capital de 60.000 millones de pesetas

Fuerzas Eléctricas de Cataluña, SA (FECSA), que hoy comienza formalmente las negociaciones para la reestructuración de su deuda, de más de 600.000 millones de pesetas, realizará una nueva ampliación de capital de casi 60.000 millones, de cuya cobertura dependerá en gran medida el control de la sociedad. El comité de acreedores formalizará hoy en Barcelona su demanda para que se modifique el plan de viabilidad y se abandone la propuesta de reducir el pago de intereses, cuya exigencia será ratificada por la compañía.

Los directivos de FECSA preparan estos días la junta general de la sociedad, prevista para el próximo sábado. Luis Magaña, que se presenta ante los accionistas tras hacerse cargo de la sociedad el pasado febrero, una vez que la junta sindical de la Bolsa de Madrid suspendiera la cotización, espera presentar su estrategia para salir de la crisis en un plazo de cinco años, contenida en el plan de viabilidad que presentó a los bancos acreedores en la famosa reunión de Londres de principios del mes pasado.Así, FECSA mantiene como bueno su plan de viabilidad, que contempla una fuerte reducción de los pagos de intereses en los dos próximos años (entre uno y dos puntos por debajo del coste del dinero en Madrid y Londres), si bien entiende que cualquier alternativa a este plan que haga Regar a los mismos objetivos es aceptable.

Ésta será, básicamente, la filosofía que presidirá el encuentro que hoy tienen previsto mantener en Barcelona directivos de la compañía catalana con el denominado subcomité de negociación de los bancos acreedores de FECSA, que preside el Bank of America y que componen 11 entidades (Sanwa Bank, Chase Manhattan, Bank of America, Orient Leasing, CECA, Caixa, Japan Overseas Leasing, Crown Leasing, Deutsche Bank, Bankers Trust y Long Term Credit Bank of Japan). Esta reunión marca el inicio formal de la renegociación de la deuda de FECSA.

Los bancos, sin embargo, acuden con una filosofía diferente, y, dentro de este esquema, está previsto que soliciten que FECSA modifique sustancialmente el plan de viabilidad, especialmente el capítulo que propone una reducción de los pagos de intereses. La banca interpreta que la reducción, ya rechazada como medida cautelar de presión, supone pérdidas contables en sus balances.

Asimismo se espera que la banca proponga un alargamiento en los plazos previstos para el saneamiento de la sociedad, con pagos diferidos a más largo plazo, incluso superando la docena de años. Los bancos estiman que la sociedad tiene capacidad a largo plazo para, con los propios fondos generados vía ingresos, hacer frente a su deuda, siempre que el perfil de ésta se ajuste a las ventas esperadas. Interpreta, además, que la Administración tiene que tener un gesto con FECSA, dentro de su plan genérico para el sector eléctrico, que permita a la sociedad un mejor desenvolvimiento.

Por otro lado, Luis Magaña propondrá a la junta de accionistas un nueva ampliación de capital (hasta el máximo legal del 50%), con el fin de incrementar la relación de recursos propios / ajenos, habida cuenta de la disminución de reservas que tendrá que realizar para cubrir los desfases contables pasados. La nueva ampliación sigue a la esperada cobertura, esta misma semana, por las empresas eléctricas (aparte de los 500 millones colocados entre los particulares) de los 23.000 millones de ampliación realizados al 70%. La nueva ampliación será cubierta previsiblemente por los bancos, las empresas eléctricas privadas, ENDESA y particulares.