Los sindicatos acusan a Solchaga de favorecer a la banca al evitar que el pago del impuesto se desvíe a las cajas

Los sindicatos representativos del sector de banca, CC OO, UGT y FITC (Federación Independiente de Trabajadores del Crédito) acusaron ayer a Carlos Solchaga, ministro de Economía, de tomar medidas en la huelga de banca -anunciada para los próximos dias 19 y 20- con el único objetivo de favorecer a los banqueros. Las organizaciones citadas han remitido una carta al ministro en la que le expresan su repulsa por la decisión de prorrogar hasta el día 25 la presentación de la declaración de la renta, lo que califican de "incalificable intervencionismo'.En el escrito se asegura que con su decisión el ministro pretende impedir que miles de millones de pesetas se desvíen a otras entidades financieras. Justo Fernández, secretario general de banca de UGT, decía ayer que "a Solchaga le huele ya la cabeza a pólvora y se está buscando la presidencia de un banco". Justo Fernández afirmó que, de otra forma, la prórroga no tiene demasiado sentido, si se tiene en cuenta que los ciudadanos pueden ingresar sus declaraciones en las miles de oficinas de cajas de ahorro, o cajas postales.

Días inhábiles

María Jesús Paredes, secretaria general de CC OO de banca, citó, como ejemplo, el hecho de que los dos días de huelga se hubieran declarado inhábiles a efectos bancarios, "medida que únicamente beneficia al banco y a las empresas".Pero, en definitiva, si la huelga va dirigida contra los bancos, los efectos se dejarán sentir sobre los ciudadanos. Andrés Hidalgo, de CC OO, decía a este respecto que se va a aconsejar a los trabajadores de banca que no realicen funciones que no les corresponden: comprobación de etiquetas, códigos, etcétera. Son acciones con las que no todos los sindicatos están de acuerdo, aunque reconozcan que los empleados de banca están haciendo tareas que son propias de funcionarios de Hacienda.

Francisco Lean, del FITC, expresó su deseo de que la opinión pública comprendiera las razones de la huelga y las antepusiera a las molestias que pudieran ocasionarse.

María Jesús Paredes desveló que en una carta interna la patronal bancaria hacía advertencias para enfrentarse a la huelga "como si los empleados de banca fueran unos delincuentes". Y Justo Fernández expresó su temor a que los dos días de huelga se desarrollaran entre la violencia y la crispación.

La huelga de banca ha sido convocada tras varios meses de negociación del convenio colectivo, y tras haberse dado prácticamente por rotas las conversaciones. Los sindicatos piden un 8% de incremento salarial la reducción de jornada con sábados libres, la reclasificación de categorías y el mantenimiento del complemento de pensión hasta el 100%.

Un portavoz de CNT anunciaba ayer que no apoyaba la convocatoria de huelga por entender que las razones de la misma no estaban claras.